¿Es razonable desperdiciar un grano de arroz en una pregunta de opción múltiple? ¿Cómo controlar la basura del campus?
Antecedentes del tema Para responder al llamado de ahorrar alimentos, muchas escuelas han hecho suficientes deberes e incluso han ido demasiado lejos. Algunas escuelas han ido demasiado lejos y han ideado todo tipo de formas de acabar con el desperdicio. Por ejemplo, algunas escuelas exigen que los estudiantes reciten canciones para la cena antes de registrar su entrada, mientras que otras escuelas exigen que los niños guarden la comida de una manera más exagerada, como por ejemplo dando una pregunta de opción múltiple para desperdiciar un grano de arroz.
El Ministerio de Educación ha publicado un plan de acción para que el sistema educativo deje de desperdiciar alimentos y bebidas y fomente hábitos frugales. El Comité Directivo del Ministerio de Educación dejó claro que se debe detener resueltamente el formalismo y que el trabajo de frenar el desperdicio en las comidas universitarias no debe desviarse.
Para detener el despilfarro en el campus, no importa cuán bueno sea el proyecto formalista para salvar las apariencias, no se puede implementar en la práctica. Por ejemplo, no hay forma de desperdiciar un grano de arroz en una pregunta de opción múltiple. ¿Hay alguien asignado para contar el arroz en el plato de cada estudiante? O si al niño realmente le queda un plato de arroz, ¿quién le hará estas preguntas de opción múltiple? Por lo tanto, este es obviamente un eslogan vacío que no se puede implementar y no tiene ningún significado práctico.
Personalmente creo que el enfoque correcto debería ser hacer cambios sustanciales en muchas escuelas, como comprender los hábitos alimentarios de los niños, dejarles comer todo lo que quieran y pagar por gramo en lugar de por porción. . Vale la pena promover este enfoque. Muchas veces, la comida se desperdicia no porque los niños quieran desperdiciarla, sino porque realmente no pueden comerla. Cuando las personas están llenas, comer exceso de comida es un desperdicio y puede conducir fácilmente a la obesidad si se deja en el estómago.
En resumen, para acabar con el desperdicio en el campus, deberíamos empezar por los hábitos alimentarios de los estudiantes en lugar de caer en el formalismo.