Muchos restaurantes ponen música, entonces, ¿cuál es el papel de tocarla?
El primer paso es etiquetar tu restaurante con atributos. De hecho, el efecto de la música y los murales de candelabros son los mismos y pueden desempeñar un papel decorativo, pero la música es invisible e intangible. Cuando entramos a un restaurante, podemos sentir la atmósfera y el estilo del restaurante a través de la música. Por ejemplo, cuando escuchamos canciones en inglés después de entrar a un restaurante, inconscientemente pensaremos que es una cafetería o un restaurante occidental. En un segundo, los clientes pueden tener una orientación básica de su restaurante.
En segundo lugar, la música puede controlar el ritmo del cliente. De hecho, este es un efecto que muchas personas no han notado. Si hay menos clientes en el restaurante, ralentizarán el ritmo de la música, por lo que los clientes comerán más lento y se quedarán más tiempo, lo que aumentará la popularidad del restaurante. Si hay mucha gente en el restaurante, el jefe quiere que los clientes terminen de comer y se vayan rápidamente, por lo que pondrá música de ritmo rápido, lo que inconscientemente aumentará la velocidad de comer. Subir el volumen de la música puede hacer que los clientes se sienten y conversen lo más rápido posible.
Por último, reproducir música también puede servir como recordatorio de negocios. Por ejemplo, muchos restaurantes amplifican deliberadamente la música media hora o 10 minutos antes de la hora de cierre. Algunos clientes están charlando alegremente y de repente se dan cuenta de que la música es cada vez más fuerte y sienten que es hora de irse, por lo que se les recuerda que deben salir del trabajo. Además, la música también puede servirnos de guía. Por ejemplo, algunas marcas utilizarán la música correspondiente. Cuando escuchemos el sonido, nuestra primera reacción será pensar en la marca, consiguiendo así el efecto publicitario.