Cómo diseñar y construir cimientos de alumbrado público circular
Determine el tamaño y la profundidad
Determine el diámetro y la profundidad de la base de la farola según las necesidades reales y los requisitos de diseño. En términos generales, el diámetro de la base de la farola debe ser lo suficientemente grande como para garantizar la estabilidad y seguridad de la farola.
Preparar materiales y herramientas
Para realizar la base de la farola circular, es necesario preparar materiales como hormigón, barras de acero, encofrados, cemento, arena y grava, además. como herramientas como palas, niveles y herramientas de medición.
Preparativos de la construcción
Determine la ubicación de las luces de la calle en el sitio de construcción y use una herramienta de trazado para marcar el contorno circular de los cimientos. Luego, limpie el área de construcción para asegurarse de que el terreno esté plano y libre de escombros y obstáculos.
Construir una plantilla
Hacer una plantilla circular según el diámetro de la base de la farola. El encofrado debe tener suficiente resistencia y estabilidad para garantizar que el hormigón se pueda verter y fijar sin problemas. Coloque la plantilla en la línea marcada y use un nivel para ajustar el nivel de la plantilla.
Instalar barras de acero
Instalar barras de acero en el encofrado según los requisitos de diseño. El número y disposición de las barras de acero deben cumplir con las normas y especificaciones pertinentes para garantizar la resistencia y estabilidad de la base. Asegure las barras de acero al encofrado y conéctelas con alambres de amarre.
Vertido de hormigón
Vierta el hormigón preparado en el encofrado y utilice una pala o un vibrador para rellenar uniformemente el hormigón en el encofrado. Durante el proceso de vertido del hormigón, puede utilizar un nivel de burbuja y herramientas de medición para comprobar el nivel y la profundidad del encofrado.
Esperar a que solidifique.
Dependiendo del tipo de hormigón y de las condiciones ambientales, espere el tiempo suficiente para garantizar que el hormigón pueda fraguar y curar por completo. Una vez que el concreto se haya fraguado, se puede quitar el encofrado y realizar los recortes y limpiezas necesarios.