Colección de ensayos para alumnos de primaria sobre virtudes y virtudes: ensayo de 600 palabras
Esforzándonos por ser un pequeño maestro de la vida
El miércoles por la tarde realizamos un concurso para ser un pequeño maestro de la vida. El cuarto grado está aprendiendo a hacer arreglos florales y el quinto grado está haciendo platos de frutas. Al mediodía, el maestro Yang nos llevó al patio de recreo. ¡El patio de recreo es muy animado! Todos adivinan con entusiasmo qué clase obtendrá el primer lugar hoy. La maestra Yang puso las frutas que trajimos sobre la mesa y pidió a nuestras cuatro alumnas en la competencia que se lavaran las manos.
El juego comenzó y todos nos pusimos a trabajar. Nuestra división del trabajo es muy clara. El maestro Yang cortará las frutas y nosotros arreglaremos los platos. Primero, utilizamos naranjas peladas para crear un mar de naranja. Luego, el maestro Yang cortó el plátano por la mitad y los colocó a ambos lados del plato. Luego, la maestra cortó el pepino en trozos y los colocamos encima del plátano para hacer hojas. ¡La maestra que estaba a nuestro lado nos elogió por hacerlo bien!
Cuando quedaba el último minuto, el profesor Yang hizo dos lindos peces dorados con tomates y pepinos. Cuando llega el momento, los profesores discuten los resultados y nuestros corazones laten y se nos suben a la garganta. Cuando la profesora anunció que nuestra clase 5(1) había ganado el segundo lugar, nos pusimos muy contentos.
Después de la competición, regresamos todos al aula. En el salón de clases vimos el video y comimos fruta al mismo tiempo. ¡Fue muy divertido! Nunca antes pensé que la fruta supiera tan deliciosa. ¡Creo que todo esto se debe a la atmósfera!
¡Este miércoles fue muy divertido y nunca lo olvidaré!