¿Comer demasiada fruta provocará caries en los niños?
Comer demasiada fruta generalmente no causa caries, pero debes cepillarte los dientes o enjuagarte la boca a tiempo después de comer fruta para prevenir las caries. Las caries pueden ser causadas por no prestar atención a la higiene bucal, o pueden ser causadas por el dolor de muelas causado por el consumo frecuente de azúcar. Por ello, debes prestar atención a desarrollar buenos hábitos de higiene, cepillarte los dientes por la mañana y por la noche, intentar no volver a comer antes de acostarte por la noche y enjuagarte la boca a tiempo después de cada comida. La relación entre las frutas y las caries es que algunas frutas son muy dulces y sus azúcares pueden ser utilizados por las bacterias, ¡provocando caries! Por no hablar del zumo, una bebida a la que es fácil añadirle azúcar. Muchos estudios relevantes han señalado que además del riesgo de caries, beber jugo de frutas también está relacionado con el consumo excesivo de calorías y la obesidad.
Si realmente quieres que tus hijos tomen zumo de frutas, se recomienda beber zumo 100 puro en lugar de bebidas de frutas con sólo 5 o 10 zumos. La fruta también contiene azúcar. Aunque son naturales, aún pueden causar caries. Además de las caries, el jugo también preocupa la obesidad. Si deseas beberlo, se recomienda beber jugo 100%. Las frutas y los jugos son ricos en vitaminas que ayudan a los niños a crecer. Además de si comes o no, la hora y la forma de comer también influirán. Ya sabes, la acidez de las frutas puede dañar directamente los dientes. Comer demasiada fruta puede provocar caries.
Como todos sabemos, las frutas son beneficiosas para el cuerpo humano, pero algunas frutas contienen una variedad de azúcares fermentados. Comer demasiado corroerá tus dientes. Si no se enjuaga la boca después de comer, los residuos de fruta del interior pueden provocar fácilmente caries dental. Los dulces tienen un alto contenido de azúcar. Si no se cepilla los dientes y se enjuaga la boca a tiempo después de comer, el azúcar permanecerá en los espacios entre los dientes, lo que puede provocar fácilmente caries dentales y hacer que los dientes de su hijo se vuelvan amarillos y negros. Las investigaciones científicas muestran que los caramelos pegajosos, como el turrón y el caramelo, permanecen en los dientes por más tiempo y, por lo tanto, son más susceptibles a las caries.
Las bebidas carbonatadas que se venden en el mercado contienen ácido carbónico y ácido fosfórico, que no solo afectan la absorción de calcio por parte del cuerpo, sino que también corroen el esmalte dental y causan grandes daños a los dientes. Por ello, los niños deben evitar beber bebidas carbonatadas en verano. Cuanto más ácidas son las frutas mayor es su contenido en vitamina C, como limones, pomelos, etc. Sin embargo, debido a su excesiva acidez, estas frutas son más corrosivas para el esmalte de la superficie dental. Esta es también la razón por la que muchas personas sienten que sus dientes están "agrios" después de comer frutas ácidas. Cuando le dé frutas ácidas a sus hijos, no coma demasiadas de una vez y recuerde cepillarse los dientes y enjuagarse la boca después de comer.