Red de conocimiento de recetas - Recetas gastronómicas - ¿La parte germinada de la papa es venenosa o es venenosa la papa entera?

¿La parte germinada de la papa es venenosa o es venenosa la papa entera?

En resumen, las patatas germinadas son venenosas y no deben comerse. Sin embargo, no es que no se pueda comer la patata entera, pero sí la parte germinada. Después de cortarlo, el resto sigue siendo comestible.

Las patatas que come la gente son sus tubérculos, que tienen muchas depresiones llamadas ojos de yema. Hay un grupo de yemas axilares en el ojo de la yema y una yema terminal en la parte superior del tubérculo. Durante el almacenamiento de patatas, si el tiempo de almacenamiento es prolongado, la temperatura es alta y la superficie de la patata está expuesta a la luz solar directa, se puede favorecer la germinación de la patata. Durante el proceso de germinación, se producen muchas enzimas en el lugar de la brotación. Las enzimas son catalizadores biológicos que descomponen las sustancias almacenadas en sustancias para el crecimiento de los cogollos.

Durante el proceso de transformación de esta sustancia se produce una toxina llamada solanina, que es un alcaloide que tiene efectos hemolíticos e irritantes sobre las mucosas. Las patatas frescas contienen una pequeña cantidad de solanina, que es inofensiva para el cuerpo humano. Sin embargo, durante el almacenamiento, el contenido de solanina de las patatas aumentó gradualmente. Cuando las patatas se vuelven de color verde oscuro o brotan, el contenido de solanina en las yemas y los ojos alcanza entre 0,3 y 0,5. Las personas que consumen entre 0,2 y 0,4 gramos de solanina pueden provocar intoxicación alimentaria.

La solanina puede irritar el tracto gastrointestinal, paralizar el centro respiratorio y provocar edema cerebral y congestión. Además, tiene un efecto hemolítico sobre los glóbulos rojos. Los síntomas son: primero, sensación de picazón y ardor en la garganta, sensación de ardor o dolor en la parte superior del abdomen, que van desde vómitos y diarrea hasta mareos, dolor de cabeza e incluso deshidratación. En casos graves, puede provocar insuficiencia cardíaca, parálisis del corazón. centro respiratorio y muerte.