Disfruta del encantador aroma del vino con una lujosa copa de vino.
Generalmente un juego completo de copas de vino debe incluir una botella de vino, un juego de vasos de agua, también llamados "vasos para beber", agua y refrescos, un juego de copas de vino tinto, un juego de champán. vasos y un juego de copas de vino blanco. Juego de copas de alcohol. También es muy particular la colocación de las copas de vino en la mesa del comedor. De izquierda a derecha, la copa de vino más grande está en el extremo izquierdo y la copa de vino blanco más pequeña en el extremo derecho. Hasta el día de hoy, la copa de vino más popular en Europa sigue siendo la copa de cristal puro. Cada copa de cristal con diferentes formas de boca y cuerpo, diferente grosor de pared, diferentes decoraciones florales y diferentes familias de diseños parece representar un hermoso estado de ánimo. Cuando una copa de vino ligeramente borracho se arremolina alegremente en la copa, simplemente jugar con ella o incluso colocarla tranquilamente frente a los invitados ya es sorprendente, sin mencionar el sabor.
Las diferentes variedades de uva y los diferentes vinos tienen diferentes características en cuanto a aroma, sabor afrutado, acidez, taninos, graduación alcohólica, etc., y estas características se verán afectadas por la forma de la copa de vino. El diseño de una buena copa de vino debe contemplar tres aspectos. En primer lugar, la claridad y el grosor de la copa son extremadamente importantes para la experiencia visual al degustar el vino; en segundo lugar, el tamaño y la forma de la copa determinarán la intensidad y complejidad del aroma del vino; finalmente, la forma del borde de la copa; la copa determina la primera interacción entre el vino y las papilas gustativas, puntos de contacto secundarios, afectando así a las diferentes percepciones de los componentes del vino, como el sabor, los taninos, la acidez, el contenido de alcohol, etc.
En primer lugar, el tamaño de la copa de vino es muy importante y afectará al aroma e intensidad del vino. El espacio de inhalación debe determinarse según las características de los diferentes vinos. Necesitas una copa grande para vino tinto, una copa mediana para vino blanco y una copa pequeña para licores. De esta manera, se realza el aroma afrutado en lugar del carácter de sabor a alcohol. En segundo lugar, al servir vino, no llene demasiado la copa. Lo mejor es servir entre 4 y 5 onzas de vino tinto, 3 onzas de vino blanco y 1 onza de licor.