Nací con anemia, ¿cómo complementarla?
Existen tres sugerencias prácticas de suplementos dietéticos para la anemia:
1. Presta atención a los suplementos dietéticos de hierro.
La causa de la anemia ferropénica está muy relacionada con la falta de hierro en el organismo. Por lo tanto, debes prestar atención a la suplementación con hierro en tu dieta diaria. En nuestra dieta diaria, las frutas que contienen más hierro son los melocotones, longanes, albaricoques, uvas, etc.
Las verduras incluyen pasta de sésamo, carnes magras, espinacas, colza, puerros, judías frescas, sangre animal, etc. Las frutas comunes incluyen melocotones, albaricoques, longans y uvas. Los alimentos anteriores son muy ricos en hierro y los amigos con anemia por deficiencia de hierro pueden elegirlos adecuadamente.
2. Prestar atención a complementar la dieta con vitamina B12 y ácido fólico.
Estos dos nutrientes se mencionan porque son sustancias indispensables para el desarrollo de los glóbulos rojos. Entre los ingredientes habituales, la vitamina B12 abunda en el hígado animal, la yema de huevo o la carne magra. El ácido fólico se encuentra principalmente en los vegetales verdes. Por lo tanto, en circunstancias normales, el cuerpo humano debe consumir algunas verduras de hojas verdes todos los días para conseguir un buen equilibrio entre carne y verduras.
3. Presta atención a comer comidas más pequeñas con más frecuencia.
Hablando de este principio, es muy similar al principio dietético para mujeres embarazadas que presentamos antes, excepto que el primero se debe a reacciones del embarazo y los vómitos son más propensos a ser causados por pacientes con anemia; por pérdida de apetito e indigestión.
Además, los pacientes con anemia tienen ciertos tabúes dietéticos, como dejar de fumar y beber, y comer alimentos menos picantes; no comer alimentos que puedan provocar fácilmente reacciones alérgicas, como camarones, cangrejos y otros mariscos; y no coma alimentos demasiado grasosos o grasosos; finalmente, evite los ingredientes fritos.