Cómo hacer queso
Ingredientes de reserva: 300 gramos de leche, 30 gramos de zumo de limón;
Proceso de elaboración: En el primer paso prepara un limón, córtalo por la mitad , y usa tus manos para exprimir el jugo de limón y tomar 30 gramos. Luego prepara la cantidad necesaria de leche, prepara una olla de leche y vierte la leche en la olla de leche;
El segundo paso es ponerla al fuego y comenzar a calentar. Cuando se vaya calentando lentamente hasta que se vean pequeñas burbujas en el borde de la olla, se puede apagar el fuego, dejar reposar unos 30 segundos y seguir calentando a fuego alto hasta que se vean pequeñas burbujas pero sin llegar a hervir;
Paso 3: Apaga el fuego y vierte el jugo de limón preprocesado en la leche tres veces. Tenga en cuenta que se requiere agitación constante durante el proceso. Una vez añadidos todos los ingredientes, déjalo reposar unos 15 minutos y prepara un bol limpio.
El cuarto paso es colocar un trozo de gasa limpia sobre el bol, verter en él la leche solidificada y aún, coger la gasa, exprimirla hasta secarla con las manos y poner el queso solidificado en el recipiente. refrigerador por 3 horas;
El quinto paso es refrigerar y cuajar. Puedes sacarlo del refrigerador, destapar la gasa y al instante tendrás un fuerte olor a leche.
Resumen del editor: Dado que el queso se llama leche concentrada, lo que significa que el queso es la esencia de la leche, comer queso es sin duda mejor que leche. Con un poco de cocción, el queso se llena de nutrientes, especialmente calcio. Comer queso en casa para los niños puede ser una buena fuente de calcio y el cuerpo absorbe fácilmente su valor nutricional. Los niños pueden comer con confianza. A mis hijos les encanta el queso. Por eso siempre lo he hecho yo mismo, de bajo coste y sin aditivos. Sabe muy bien y los niños se sentirán más tranquilos después de comerlo. Aprendieron a elaborar su propio queso, que podían elaborar cuando quisieran.
Habilidades culinarias:
1. Generalmente, la proporción de leche y jugo de limón es de 10:1. El jugo de limón es lo mejor, pero si no lo tienes, puedes usar vinagre blanco en su lugar, pero es posible que sepa menos bien. Se puede decidir según la situación real.
2. Al calentar leche, tenga cuidado de no esperar a que hierva. Cuando esté casi hirviendo, apaga el fuego y déjalo reposar un rato antes de volver a calentar. Esto se puede repetir dos veces. Esto puede evitar que la pasta de leche. Una temperatura demasiado alta pueda afectar fácilmente el producto terminado.
3. Debido a que la proporción es pequeña, es fácil exprimir el agua, pero si la proporción es grande, puedes colocar objetos pesados sobre la gasa, lo que filtrará más agua. Al no contener aditivos, se recomienda consumirlo en 2 días.