¿Cómo pueden las parejas liberar el "deseo" de manera razonable?
Se dice que libera el deseo, pero hacer el amor siempre a una hora determinada y en un punto fijo sólo hará que ambas partes se aburran y no aportarán mucho placer. El arreglo más perfecto se basa en los criterios de "querer" y "no estar cansado" de la pareja. La mayoría de la gente quiere saber cómo ordenar científicamente la frecuencia para evitar dañar el cuerpo. Esto depende del deseo del hombre. Los hombres de diferentes edades tienen diferentes patrones y frecuencias sexuales.
Los veinteañeros están llenos de energía y pueden tener relaciones sexuales cada dos horas. Treinta años, fuerte y capaz de tener sexo todas las noches. Cuando me acerco a los cuarenta, tengo relaciones sexuales cada cinco días. A los cincuenta años conozco mi destino y ya no intento ser testarudo. Tengo relaciones sexuales cada primer y decimoquinto día del mes lunar, es decir, una vez cada medio mes. A los sesenta años, los hombres deben centrarse en cuidar su cuerpo, preferiblemente una vez al año.
Por supuesto, la sociedad progresa constantemente y la esperanza de vida de las personas se ha ampliado considerablemente. Por lo tanto, el número específico de relaciones sexuales de los hombres modernos debe considerarse en función de su propia constitución física, mentalidad y estado de salud. . Las personas de veintitantos años ya no pueden actuar a ciegas, sino que deben hacerlo dentro de sus capacidades. Mientras los hombres de mediana edad, de unos cuarenta años, estén en buenas condiciones físicas, no es necesariamente imposible tener relaciones sexuales todas las noches. Los hombres de entre 50 y 60 años no necesitan seguir ciegamente esta regla siempre que sus cuerpos sean todavía muy viejos. Pueden ejercer la moderación adecuada.
Considerando que el deseo sexual de cada persona es fuerte o débil, y se ve afectado por muchos factores como la edad, el sistema, el clima, el entorno, etc., el número de veces no se puede especificar mecánicamente, sino que se debe ajustar adecuadamente. según las circunstancias específicas de ambas partes. Por ejemplo, durante el período de recién casados, el deseo sexual será más fuerte y la frecuencia de las relaciones sexuales aumentará inevitablemente. En los primeros meses después del matrimonio, suele ser de dos a tres veces por semana. A medida que envejece, disminuirá gradualmente a una vez cada una o dos semanas.