Las mujeres embarazadas pueden comer pollo y sopa unos días después de la cesárea.
El pollo es un alimento nutritivo y grasoso. Las mujeres embarazadas deben llevar una dieta ligera una semana después del parto, comer más frutas y verduras y comer un poco de pollo con moderación una semana después. indigestión, suplementación excesiva y bloqueo de la leche. Si realmente quieres comer pollo, asegúrate de comerlo después de defecar. De lo contrario, ingerir una gran cantidad de sólidos en el estómago que no vuelve a la normalidad puede provocar estreñimiento y obstrucción intestinal.
1. Ingredientes para la sopa de pollo con huesos negros guisada: 1 pollo con huesos negros, 2 cebolletas, 1 jengibre, 2 cucharaditas de vino de cocina, 2 cucharaditas de sal refinada, 1 cucharadita de glutamato monosódico. Método: (1) Sacrificar y lavar el pollo de huesos negros, blanquearlo en agua hirviendo para quitarle la sangre. (2) Ponga el pollo con huesos negros, el vino de cocción, el cebollino y el jengibre en una cacerola, déjelo hervir a fuego alto, luego cocine a fuego lento durante 2 horas, agregue sal refinada y glutamato monosódico. 2. Ingredientes para sopa de gelatina de piel de burro, dátiles y pollo con huesos negros: pollo con huesos negros, gelatina de piel de burro, dátiles rojos, longan, moras, plato tapado. Método: Lave los materiales anteriores y cocínelos a fuego lento. 3. Ingredientes para el caldo de pollo con maíz y castañas: castañas, maíz, pollo, jengibre, cebollita de verdeo y un poco de sal. Método: (1) Lave el pollo, córtelo en trozos, póngalo en una olla, agregue suficiente agua, cebollas verdes y rodajas de jengibre, déjelo hervir a fuego alto y cocine a fuego lento durante 1 hora. (2) Cortar el maíz en gajos, pelar las castañas, ponerlas en la olla y seguir cocinando a fuego lento durante 1 hora. (3)Por último sazonar con un poco de sal.
Combinación de dietas durante el periodo de confinamiento
La alimentación y nutrición de la madre durante el periodo de confinamiento son muy importantes. Por un lado, es necesario complementar el esfuerzo físico durante el parto y, por otro, también debe cubrir las necesidades de la lactancia. En términos generales, las mujeres no necesitan evitar comer alimentos fríos, picantes o masticables.
En algunos lugares de nuestro país, a las mujeres no se les permite comer pollo, pescado y camarones durante un mes después del parto, y solo se les permite comer agua con azúcar moreno y gachas de mijo. No se trata sólo de una falta de calorías en la dieta, sino también de una grave falta de proteínas, grasas, vitaminas y minerales, lo que es muy perjudicial para las mujeres y los bebés. En algunos lugares, a las mujeres embarazadas no se les permite comer carne ni siquiera fruta. Se dice que comer carne y frutas durante el parto detendrá la secreción de leche materna y provocará que no se produzca leche. Esto es infundado.