¿Qué hacer si el frigorífico huele mal?
Mete los restos de comida en el frigorífico. Si al cabo de un tiempo caduca, añade más cubitos de hielo.
Limpia todos los estantes y cajones con agua mineral. Y limpie al máximo las paredes interiores y el fondo del frigorífico, incluso el fondo del cajón para verduras.
Si tu frigorífico aún huele mal, compra algunos posos de café recién molidos.
Espolvorea una o dos tazas de café molido en un plato grande y extiéndelas sobre el plato. Si el olor en el refrigerador es intenso, agregue algunas bandejas adicionales de café molido.
Coloca la bandeja en el centro del estante.
Mantener la puerta del frigorífico cerrada durante 24 a 48 horas.
Cuando casi se acabe el tiempo, retira los posos del café y añade la comida.
Compra bicarbonato de sodio en la tienda.
Puedes picar carbonato de sodio endurecido y colocarlo en el estante superior del refrigerador, o puedes guardar pan de soda en una caja de plástico en el refrigerador.
Guarda en el frigorífico algunos trozos pequeños de refresco endurecido que no quieras sellar.
Al cabo de unos tres días, fíjate en el olor que hay en el frigorífico.
Si el olor desaparece, puedes limpiar el refresco endurecido en el refrigerador.
Consejo:
Si desea utilizar un método que requiera un poco menos de mano de obra pero no quiere liberar comida en el refrigerador, puede poner cubitos de refresco en un recipiente pequeño. Luego póngalo en el refrigerador o use periódicos nuevos o carbón para absorber los olores.
Si quieres mantener el frigorífico cerrado durante un tiempo, primero libera los alimentos y luego, tras limpiar el frigorífico, abre un poco la puerta. Esto se debe a que incluso un refrigerador limpio y caliente puede tener algo de olor durante un tiempo después de cerrar la puerta.
Para evitar que se desarrollen olores en el futuro, debes asegurarte de limpiar los alimentos vencidos en tu refrigerador una vez a la semana y observar más de cerca qué alimentos se han echado a perder. Esta también es una buena manera. para recordarte que no dejes que la comida chatarra apeste en tu cocina.
Mantén los alimentos en recipientes herméticos siempre que sea posible. De esta forma la comida durará más y el olor no se extenderá si se echa a perder.