¿Cómo gestionar el cultivo de setas ostra en zonas rurales?
Los hongos ostra son hongos de fructificación de temperatura variable y baja. La temperatura de siembra a principios de primavera debe ser inferior a 8°C. El mejor período de siembra es desde mediados de febrero hasta mediados de marzo. Al seleccionar cepas, elija cepas que tengan entre 50 y 60 días y que no envejezcan, se encojan ni se estanquen. Desde el exterior, el micelio es blanco, esponjoso, denso, uniforme y robusto. Las cepas bacterianas seleccionadas deben mezclarse y usarse, y una cepa no se puede usar sola porque afectará demasiado las ventas del producto.
Cuando se cultivan hongos ostra en zonas rurales, generalmente se eligen casas sencillas y ociosas y se utilizan invernaderos como casas para los hongos. Por supuesto, también hay lugares como refugios antiaéreos y cuevas donde se cultivan setas ostra. Pese el material de cultivo en proporción, revuelva uniformemente y luego esterilícelo utilizando el método de esterilización a granel y el método de esterilización por extensión con vapor capa por capa. La esterilización debe ser exhaustiva y cada recipiente es adecuado para esterilizar entre 200 y 500 placas. Cuando la temperatura del material desciende a aproximadamente 25°C, la inoculación se puede realizar de acuerdo con los requisitos de la operación aséptica.
Luego se realiza el manejo del período de germinación y colonización micelial: se requiere que la temperatura promedio diaria esté alrededor de -6°C ~ 5°C si no se puede alcanzar la temperatura mínima requerida para el crecimiento del micelio. por encima de 5°C, se requiere calentamiento artificial. Puedes rodear la pila con tallos de maíz o paja por la noche. A medida que aumenta la temperatura, las bacterias se propagarán y provocarán contaminación. En esta etapa, la atención se centra en prevenir la contaminación, lo que requiere voltear los platos cada cinco a siete días y aumentar la ventilación. A mediados de abril, la temperatura aumentó y el micelio había crecido por toda la placa. En este momento, aumenta la respiración de las hifas, aumenta la demanda de oxígeno y se libera calor. Es necesario controlar la temperatura en torno a los 18°C y aumentar la ventilación.
Cuando llega la temporada de altas temperaturas, en julio y agosto, las setas de ostra generalmente han formado una capa cerosa de color amarillo-marrón, que es muy elástica y mejora su resistencia a ambientes adversos. En esta etapa, se debe reforzar la sombra, se debe proporcionar ventilación día y noche y se deben instalar redes de protección solar de doble capa o instalaciones de rociado de agua para enfriar. Todos los respiraderos están equipados con mosquiteros para evitar que entren insectos adultos o que dañen a las larvas. Si es necesario, se pueden pulverizar pesticidas biológicos de baja toxicidad y que no dejen residuos.
Siempre que se pueda gestionar eficazmente el proceso de cultivo de las setas ostra, se obtendrá un alto rendimiento.