¿Qué alimentos no deben comer los niños? A continuación te presentamos cinco alimentos con los que debes tener cuidado de no dejar que tus hijos coman en exceso.
El glutamato monosódico es un condimento común. Agregar glutamato monosódico a los platos puede hacer que los platos sean más deliciosos, pero para los bebés, aún es necesario comer menos alimentos que contengan glutamato monosódico. Esto debilitará la resistencia del niño, especialmente si no se consume adecuadamente. Por ejemplo, el glutamato monosódico liberará sustancias tóxicas después de un procesamiento a alta temperatura, como cocinar al vapor, hervir y freír, lo que afectará la salud de su bebé. En los niños, el glutamato monosódico suele causar deficiencia de zinc y afecta el desarrollo intelectual.
En segundo lugar, los alimentos fritos y encurtidos
Los alimentos fritos y encurtidos contienen peróxido de lípidos. La ingesta prolongada de esta sustancia afectará el desarrollo del sistema nervioso del cerebro, puede afectar la inteligencia del bebé y también puede provocar un envejecimiento cerebral prematuro.
En tercer lugar, la comida salada
A menudo hablamos de dieta baja en sal, que es una forma de comer muy saludable. En los bebés, los órganos del cuerpo aún no están maduros y la capacidad metabólica de los riñones es deficiente. Si se inyecta demasiada sal, las células cerebrales pueden quedar en un estado de hipoxia, afectando el desarrollo intelectual de los niños de hoy. Por la salud de tu bebé, debes comer menos encurtidos, verduras encurtidas, pescado salado y tocino.
En cuarto lugar, los alimentos que contienen plomo
El plomo es un metal pesado perjudicial para la salud. La ingesta excesiva de plomo puede provocar intoxicación por plomo, que afecta el sistema nervioso del cuerpo y la salud del cerebro. El niño sufrirá retraso mental y dificultad para concentrarse. Los alimentos comunes que contienen plomo incluyen palomitas de maíz, alimentos enlatados, huevos en conserva, etc.
5. Alimentos que contienen aluminio
El aluminio también es un metal pesado. Si se deposita en el cuerpo humano, supondrá una gran carga para el hígado y los riñones humanos y afectará el desarrollo intelectual de los bebés y niños pequeños. Los alimentos que contienen más aluminio incluyen palitos de masa fritos, palitos de masa fritos, medusas, etc.