Los calamares vampiros y los pulpos pertenecen a la misma especie y pueden ser los antepasados de las sepias y los pulpos.
1. Evolución biológica de los calamares vampiros
Los calamares vampiros son similares a las sepias y a los pulpos, pero no exactamente iguales. Se cree que el calamar vampiro es el antepasado del pulpo y la sepia. Emigró del mar poco profundo al mar profundo hace cientos de millones de años para evitar ser cazado por sus enemigos naturales, los dinosaurios, por lo que la apariencia del calamar vampiro no ha cambiado durante cientos de millones de años.
Debido a que migraron a las profundidades marinas relativamente temprano, los calamares vampiros se han adaptado al ambiente de las profundidades marinas muy temprano. Aunque la apariencia no cambia, la falta de oxígeno en el interior hace que la sangre cambie y el cuerpo brillará en las profundidades del mar para advertir a algunas criaturas que no se acerquen a él.
2. Hábitos de vida del calamar vampiro
A diferencia de los pulpos y las sepias comunes, los calamares vampiro no tienen sacos de tinta. Los tentáculos del calamar vampiro tienen dientes tan afilados como uñas, por eso se les llama calamares vampiro. Los investigadores encontraron que un par de tentáculos pueden extenderse a lo largo de un cuerpo alargado, y los más largos se extienden hasta el doble de la longitud del cuerpo. Los calamares vampiros dependen de este par de tentáculos y otros tentáculos para capturar a sus presas. Cuando encuentra dificultades, el calamar vampiro cubrirá todos sus tentáculos para formar un escudo agresivo para protegerse.
Hay muchas criaturas en el mundo que han existido desde la antigüedad. Hay muchos otros animales que se parecen a los calamares vampiros. Estas criaturas desempeñan un papel muy importante en los científicos que estudian el medio ambiente del mundo y los acontecimientos antiguos. Sin embargo, la gente todavía debe prestar atención a protegerlas, porque estas especies también son muy vulnerables a la extinción, por lo que también debemos prestar atención a proteger a los organismos mientras investigamos.