Como dice el refrán: "Los hombres tienen miedo a los caquis, las mujeres a las peras y las cerdas a las sandías".
La razón por la que se dice que "las mujeres le tienen miedo a las peras" es porque las peras son frescas por naturaleza y comer más es beneficioso. En particular, las mujeres necesitan mantenerse calientes. Aunque las peras pueden calmar la sed, no deben comerse en exceso, de lo contrario provocarán fácilmente molestias físicas. Las mujeres, especialmente durante el período menstrual, deben evitar los alimentos crudos y fríos. Además, la pera es un homófono de "caminar". Muchos amigos deben haber escuchado a otros decir que comer peras da mala suerte, pero refleja el aprecio de la gente por una vida mejor.
Los caquis también son árboles frutales muy comunes en las zonas rurales, especialmente en otoño después del comienzo del verano, los caquis amarillos siempre hacen salivar a la gente. Pero desde que éramos pequeños, nuestros padres a menudo nos aconsejaban que comiéramos menos caquis. No entendíamos por qué en ese momento, pero ahora creo que es bueno que nuestros padres nos disuadieran, de lo contrario estaríamos buscando problemas. El llamado "los hombres tienen miedo a los caquis" se refiere al miedo a comer demasiado, porque la pulpa de los caquis contiene ácido tánico, que no solo reacciona con el hierro en el cuerpo humano, afectando así la absorción de hierro, sino también Se combina fácilmente con las proteínas para formar cálculos de caqui gástrico. Se puede ver que aunque los caquis son deliciosos, no deben ser golosos.
En cuanto a la última frase, "Las cerdas tienen más miedo a las cáscaras de sandía", no tiene mucho significado en sí misma. El propósito también es una rima especialmente agregada por la gente para hacer eco del dicho anterior. Está en el poema de Bixing. El enfoque es algo similar. Los amigos que crecieron en zonas rurales deben estar familiarizados con la alimentación de los cerdos. Cuando era niño, solía tirar cáscaras de sandía en los comederos de los cerdos como alimento. Ahora que lo pienso, me siento un poco avergonzado. Resulta que la cáscara de la sandía también se enfría. A menudo tenemos diarrea si comemos demasiada sandía, y los cerdos no son una excepción. Comer demasiada cáscara de sandía también puede causar diarrea.
En general, aunque estas frases no tienen base científica en la antigüedad, la gente ha adquirido estas experiencias a través de la observación a largo plazo de que comer demasiado es malo para el cuerpo. Ahora que la ciencia se ha desarrollado, esto ha quedado plenamente demostrado. Se puede ver que, aunque los antiguos no podían decir esto, su opinión de aconsejar a la gente que comiera menos es correcta. Por lo tanto, cuando estudiamos la cultura popular, no debemos hacer generalizaciones. Un título como este puede parecer inexplicable a primera vista, pero si lo analizamos más de cerca, demuestra que los consejos de los antiguos no son todo basura feudal.