¿Cuáles son algunas comidas deliciosas que son hermosas y fáciles de cocinar?
En primer lugar, las empanadillas fritas
A muchos jóvenes les gusta guardar unas empanadillas congeladas rápidamente en el frigorífico y sacarlas cuando quieran. Hace mucho que estamos cansados de las albóndigas hervidas. También podríamos usar albóndigas congeladas rápidamente para hacer albóndigas fritas. El fondo de la olla está crujiente y las cebolletas están picadas. Ahora ponemos un poco de aceite en la sartén. No es necesario descongelar las albóndigas. Simplemente tírelo a la olla y codifíquelo. Empezar a freír a fuego medio-bajo. Asegúrate de observar atentamente el fondo de las bolas de masa durante el proceso de elaboración. Si empieza a dorarse, podemos echarle agua purificada. La cantidad de agua purificada no debe exceder 1/3 de Jiaozi. Cuando el agua esté casi seca, vierte un poco de harina y agua. La proporción de harina y agua es 1:10. Una vez que la harina y el agua estén completamente secas, se hacen unas deliciosas albóndigas fritas, espolvoreadas con unas semillas de sésamo negro y cebollas verdes picadas.
En segundo lugar, la sopa de huevo
Los huevos son una de las fuentes esenciales de nutrientes para el cuerpo humano. El método de elaboración de natillas de huevo es muy sencillo, pero hay muchos detalles a los que debemos prestar atención. Comer un plato de crema de huevo por la mañana nos mantendrá con energía durante todo el día. Batir dos huevos en un bol, añadir un poco de sal, aceite de cocina y 280 ml de agua tibia, remover uniformemente y luego tamizar, lo que hará que los huevos queden más delicados. Hierva agua en una olla. Después de que hierva, ponga el líquido del huevo directamente en la olla y cocine al vapor durante unos 10 minutos. En este momento, la natilla está completamente cocida y la superficie queda como un espejo.
Tercero, tortilla de cebolleta
Mezclamos toda la harina, los huevos y la cebolleta y añadimos un poco de sal al gusto. Engrasar la sartén con aceite. Cuando el aceite esté caliente, verter una capa de masa y freír por ambos lados hasta que se doren. Lo mejor es utilizar una sartén y no extenderla demasiado espesa para no afectar el aspecto y el sabor.