La bomba más grande de la Segunda Guerra Mundial explotó cuando la estaban desactivando. ¿Por qué siguió explotando después de tanto tiempo?
Un problema importante con las municiones sin detonar es que con el tiempo, los mecanismos explosivos y de iniciación de las municiones se deterioran gradualmente, lo que los hace más propensos a activarse y potencialmente más peligrosos cuando se manipulan. Numerosos casos han demostrado que los civiles pueden entrar en contacto sin darse cuenta con municiones sin detonar que han existido durante muchos años, causando lesiones mortales.
Creen que este tipo de arma es inofensiva, pero en realidad es un explosivo mortal e inestable que explotará una vez activado y causará daños graves o incluso mortales a los civiles.
Por lo tanto, debería haber conciencia mundial de que las municiones sin detonar no deben ser manipuladas ni manipuladas por personas sin formación profesional. Además, después de descubrir municiones sin detonar, se debe informar a la comisaría de policía local de la ubicación específica de las municiones sin detonar, y los especialistas en eliminación de municiones explosivas las desmantelarán o garantizarán su seguridad.
Esto incluye proyectiles de artillería, granadas, minas, morteros, cohetes, misiles y otras municiones. Estas armas pueden explotar décadas después de haber sido desplegadas o abandonadas, lo que plantea un riesgo letal e inestable.
Información ampliada:
Tecnología de detección
La ubicación de municiones sin detonar en las profundidades del subsuelo se determina mediante el análisis de fotografías aéreas históricas identificables. El desarrollo de la tecnología moderna ha hecho que se utilicen detectores electromagnéticos y magnéticos que pueden combinar la geofísica con la tecnología de detección.
Ahora, la tecnología de mapeo digital puede predecir con mayor precisión el alcance de la contaminación de las municiones sin detonar, a fin de formular con precisión planes de evacuación posteriores, reducir el costo de excavación de cada punto de detección de metales y acelerar el proceso de remoción. Los detectores magnéticos pueden detectar la presencia de municiones sin detonar y proporcionar datos geotécnicos antes de la excavación.