¿Qué snack crees que nunca olvidarás?
Ding Ding caramelo, "ding ding-dang, ding-ding-dang", con un sonido de golpe tan rítmico, coger uno y llevárselo a la boca es como meterse una piedra dulce, después de masticar. Poco a poco se vuelve suave, se estira lentamente en la boca y se envuelve firmemente entre los labios y los dientes. No solo es dulce, sino que también tiene el sabor de la infancia.