Siete consejos sobre la dieta materna y los siete mejores alimentos
Siete cosas importantes a las que prestar atención en la dieta materna y los siete mejores alimentos
1: Siete cosas importantes a las que prestar atención en la dieta materna.
1. Comer cada vez más.
El útero agrandado durante el embarazo ejerce presión sobre otros órganos y la función gastrointestinal no ha vuelto a la normalidad después del parto, por lo que es necesario realizar comidas pequeñas con más frecuencia, de cinco a seis veces al día. Adoptar el principio de comer comidas pequeñas con frecuencia no sólo garantiza la nutrición, sino que tampoco aumenta la carga sobre el tracto gastrointestinal, lo que permite que el cuerpo se recupere lentamente.
2. Una combinación de carne y verduras, rica en nutrientes
Consume más alimentos que contengan calcio y hierro, incluyendo carne fresca, pescado, algas, verduras y frutas.
Desde una perspectiva nutricional, diferentes alimentos contienen diferentes tipos y cantidades de nutrientes, y la nutrición humana es multifacética. Los hábitos alimentarios excesivos pueden provocar algunas deficiencias nutricionales. La mayoría de las personas recomiendan comer pollo, pescado y huevos durante el próximo mes e ignoran la ingesta de otros alimentos. Además de contener nutrientes que los alimentos cárnicos no contienen o que rara vez contienen, algunos alimentos vegetarianos generalmente contienen más fibra, lo que puede promover la digestión y prevenir el estreñimiento. Por tanto, la combinación de carne y verduras es rica en nutrientes.
3. Reponer adecuadamente el agua corporal.
Las madres primerizas sudan mucho durante y después del parto, y además tienen que amamantar a sus bebés recién nacidos. El 88% de la leche es agua. Por lo tanto, las nuevas madres deben reponer suficiente agua y beber sopa es la mejor manera de reponer los nutrientes y el agua.
4. Empiece con alimentos líquidos o semilíquidos.
Las nuevas madres se encuentran en un estado débil después del parto y su función gastrointestinal inevitablemente se verá afectada. Especialmente para las nuevas madres que han tenido una cesárea, la peristalsis del tracto gastrointestinal debe recuperarse lentamente después de la anestesia. Por eso, en la primera semana después del parto lo mejor es ingerir alimentos líquidos y semilíquidos que sean fáciles de digerir y absorber, como gachas, natillas, fideos de arroz, sopa de fideos, sopas variadas, etc.
5. Ligera y adecuada, de fácil digestión.
La dieta durante el confinamiento debe ser ligera y adecuada. Ya sean sopas variadas u otros alimentos, deben ser lo más ligeros y graduales posible. Evite los pescados y las carnes grandes, sólo tome suplementos. Es mejor añadir menos sal, pero no poca o ninguna. Por ejemplo, agregar una pequeña cantidad de condimentos calientes como cebolla, jengibre, ajo y pimienta en polvo a los alimentos es beneficioso para la circulación sanguínea y la eliminación de la estasis sanguínea.
6. No es aconsejable ingerir alimentos fríos y duros.
No es aconsejable estar abrigado y fresco después del parto. El calor puede activar la circulación sanguínea, mientras que el frío puede coagular la sangre. Durante el proceso de recuperación del cuerpo en el segundo mes, hay una gran cantidad de líquido turbio (loquios) que debe excretarse del cuerpo y hay congestión en el área de la lesión del parto. La comida fría provocará una mala circulación sanguínea en el cuerpo y afectará la descarga de los loquios. También puede provocar trastornos gastrointestinales y diarrea. Pero primero puedes poner algunas frutas sacadas del refrigerador en agua tibia, esperar a que se calienten y luego cortarlas en trozos para consumirlas.
7. Evite tomar suplementos a ciegas.
Tomar suplementos a ciegas, como el ginseng, puede no solo ayudar al cuerpo a recuperarse, sino que también puede causar estreñimiento, sangrado de encías, mal aliento y otros síntomas adversos a las nuevas madres. Es necesario considerar no sólo la condición física de la nueva madre, sino también las diferencias estacionales y los cambios ambientales.
Dos: ¡Los 7 mejores alimentos para la dieta materna!
Guiso
Es rico en nutrientes, de fácil digestión y absorción, favorece el apetito y la secreción de leche y ayuda a la recuperación de las madres. La sopa de pollo, la sopa de costillas de cerdo, la sopa de ternera, la sopa de manitas de cerdo y la sopa de codos se comen alternativamente. Entre ellas, las manitas de cerdo guisadas con sopa de soja son un alimento tradicional para la lactancia materna.
Huevos (de gallina)
Alto contenido en proteínas, aminoácidos, minerales y alta tasa de digestión y absorción.
Cómelo en forma de huevos duros, sopa de huevo, sopa de huevo al vapor o sopa de fideos. Tradicionalmente, las mujeres embarazadas deberían comer al menos diez u ocho huevos al día durante el parto. De hecho, dos o tres huevos pueden satisfacer plenamente las necesidades nutricionales. Si se come demasiado, el cuerpo no puede absorberlo.
Gachas de mijo
Ricas en vitamina B, fibra dietética y hierro. El mijo se puede cocinar solo o junto con arroz, lo que tiene un efecto muy nutritivo. Pero no confíe exclusivamente en las gachas de mijo, porque los nutrientes que contiene el mijo no son muy completos.
Alimentos rojos como el azúcar moreno, los dátiles rojos y los frijoles rojos.
Rico en hierro, calcio, etc. , que es beneficioso para el aumento de la hemoglobina y ayuda a las mujeres embarazadas a reponer la sangre y a disipar el frío. Pero cabe señalar que el azúcar moreno es azúcar gruesa con muchas impurezas y debe cocinarse antes de consumirse.
Pescado
Es rico en nutrientes, favorece la lactancia y tiene un sabor delicioso. Entre ellos, la carpa cruciana y la carpa son las primeras opciones y se pueden cocinar al vapor, estofadas o guisadas en sopa o carne.
Sésamo
Rico en proteínas, hierro, calcio, fósforo y otros nutrientes, nutre el organismo y es muy adecuado para los requerimientos nutricionales de la mujer embarazada.
Verduras y frutas