¿Por qué los coreanos a menudo boicotean espontáneamente los productos japoneses?
Como todos sabemos, la relación amistosa entre un país y otro se basa en una base económica, y dos países sólo pueden tener intercambios amistosos sobre la base de intereses. La falta de armonía entre Japón y Corea del Sur no es sólo una cuestión económica. Los conflictos entre Corea del Sur y Japón existieron mucho antes que los conflictos entre China y Japón. Como todos sabemos, Japón ha aprendido profundas lecciones de muchos países asiáticos. Corea del Sur y la Península de Corea son originalmente un solo país. Desde que Japón gobernó la Península de Corea durante medio siglo, el pueblo japonés ha estado oprimiendo al pueblo de la Península de Corea y sometiéndolo al colonialismo. Incluso después de la guerra, sus dos países eran hostiles y estaban dispuestos a ir a la guerra en cualquier momento. Pero los dos países tuvieron que establecer relaciones diplomáticas en 1965 y desarrollarse juntos económicamente. Pero todavía hay muchos conflictos entre ellos, como disputas territoriales como la de Dokdo (Takeshima), que separa a los dos países.
Japón se niega a reflexionar sobre su crimen de agresión.
La razón de las relaciones discordantes entre Corea del Sur y Japón que acabamos de mencionar es también el daño colonial causado por Japón al pueblo de la Península de Corea en el pasado. Japón siempre se ha negado a reconocer cuestiones históricas. La distorsión de la historia por parte de Japón ha enfurecido mucho al pueblo coreano. El boicot espontáneo del pueblo coreano a los productos japoneses muestra su negativa a reflexionar sobre el crimen de invadir Japón. Muchas ONG han incluido en la lista negra a empresas japonesas.
La resistencia de Corea del Sur a las sanciones comerciales japonesas
Las sanciones comerciales de Japón han despertado la ira del pueblo coreano. El Ministro de Economía de Japón afirmó que Japón no ha considerado en absoluto levantar las restricciones a las exportaciones de alta tecnología a Corea del Sur. En respuesta a estas sanciones comerciales contra Japón, el pueblo surcoreano expresó su intención de boicotear los productos japoneses y viajar a Japón.