¿Por qué es tan difícil para las personas honestas de esta sociedad hacerse ricas?
Primero, la actitud. Muchas personas honestas no son muy rigurosas al hacer las cosas y se dejan influenciar fácilmente por los demás. Siguen los consejos de otras personas. Al principio pensaron que todo saldría según lo planeado. Sin embargo, una vez que alguien dijo que el primer plan no era bueno, comenzó a vacilar y cambió al segundo plan. Si haces las cosas una y otra vez y no las haces según el plan original, naturalmente no lograrás nada ni harás nada bien.
En segundo lugar, los principios de hacer las cosas. Muchas personas honestas muestran un sentimiento de cobardía desde adentro hacia afuera. Cuando nos encontramos con dificultades, la primera reacción suele ser escapar en lugar de afrontar las dificultades y trabajar activamente para resolverlas y superarlas. Cuando nos encontramos con una disputa de intereses, no tomaremos la iniciativa de luchar por condiciones favorables para nosotros, sino que queremos protegernos. Incluso si perdemos dinero, también queremos poner fin a la disputa lo antes posible. Escapar y darse por vencidos son sus primeros principios para hacer las cosas, mientras que los ricos son todo lo contrario. Los ricos siempre dan la primera prioridad a la hora de hacer las cosas, lo afrontan positivamente y nunca se dan por vencidos. ¿Cómo puedes convertirte en una persona rica si eres muy diferente de los principios de cómo hacen las cosas los ricos?
En tercer lugar, la capacidad real. Muchas personas honestas tienen capacidades reales limitadas, lo que también les hace tener miedo y falta de voluntad para esforzarse y competir. Saben que sus capacidades son limitadas, por eso piensan que en lugar de competir con otros y terminar en el fracaso, es mejor no participar en ello desde el principio, para así al menos quedar invictos. Sin el sentido de competencia, se alejará de su condición de persona rica.
Si quieres convertirte en una persona rica, debes aprender los principios de la vida y el trabajo, e imitar a los ricos en la toma de decisiones. Sólo así podrás aparecer en las filas de los ricos.