¿Pueden los perros comer arroz al curry?
Alimentos tabú: Las uvas, las pasas y las pasas pueden provocar insuficiencia renal en los perros. A veces, una sola pasa puede matar a un perro. [29-31]
Macadamias y nueces Las nueces de macadamia pueden provocar colapso, espasmos musculares y parálisis. Otros frutos secos tampoco son buenos para los perros. El alto contenido de fósforo en las nueces puede provocar cálculos renales y debe evitarse. La excepción es la mantequilla de maní, pero si le das mantequilla de maní, elige mantequilla de maní orgánica y sin azúcar.
Los aguacates, las frutas con hueso y los árboles frutales son todos venenosos. Puede provocar que el perro tenga dificultad para respirar y acumulación de líquido en el pecho, el abdomen y el corazón. Según algunas teorías, el aceite de aguacate es bueno para los perros.
Las "semillas y corazones" de manzanas, cerezas, peras...o frutas similares Las semillas y corazones de manzanas, cerezas, peras o frutas similares contienen cianuro, que es un veneno mortal para los humanos y los perros. El cianuro también puede estar presente en los intestinos de un perro, donde puede matarlo sin previo aviso dentro de las 24 horas.
Otras frutas, como el consumo habitual de frutas, también pueden provocar heces blandas o diarrea en perros debido a una ingesta excesiva de vitamina C y fibra, e incluso insuficiencia renal y cálculos renales en la vejez.
Las verduras, las cebollas/cebolletas/puerros/pimientos, las cebollas y las cebolletas contienen disulfuro, que es inofensivo para los humanos, pero puede causar oxidación de los glóbulos rojos en los perros, causando posiblemente anemia hemolítica y hematuria. Incluso el calentamiento no puede destruir las sustancias nocivas que contiene, así que no le dé cebollas ni cebolletas a su perro.
Tomates Los tomates pueden provocar convulsiones y latidos cardíacos irregulares. Pero esta cuestión es discutible porque algunos alimentos para perros de alta calidad contienen tomates.
La vitamina H contenida en los huevos crudos puede favorecer el crecimiento del perro y la salud del pelaje. La proteína del huevo crudo contiene una sustancia proteica antivitamina H, que dificultará la absorción de vitamina H por parte del perro, provocando una deficiencia de vitamina H, lo que provocará diarrea, úlceras orales, enfermedades de la piel, etc. Asegúrate de cocinar los huevos antes de dárselos a tu perro. Los huevos crudos pueden provocar intoxicación por salmonella y lo más apropiado es calentarlos antes de dárselos a los perros.
Los hongos y setas comestibles que se venden en el mercado de setas son inofensivos para los perros. Sin embargo, aún debes evitar dejar que los perros los coman para evitar desarrollar el hábito de comer hongos y comer accidentalmente hongos venenosos en la naturaleza.
El exceso de sal en los condimentos puede provocar problemas renales.
Los perros dulces necesitan suplementos de calcio, pero los dulces afectarán la absorción de calcio. Especialmente en verano, no es imposible darle menos helado a tu perro. Es mejor comer paletas heladas dulces solo con hielo, ¡lo cual tiene el mejor efecto refrescante!
La nuez moscada puede provocar convulsiones, infartos y la muerte.
El exceso de grasa en las grasas animales, los alimentos fritos y los restos de sopas pueden provocar pancreatitis.
Un hueso afilado que puede perforar el tracto gastrointestinal. Los fragmentos de hueso, como los huesos de pollo, pueden perforar la garganta del perro o cortarle la boca, el esófago, el estómago o los intestinos. Si quieres darle huesos, cocínalos en una olla a presión. La médula ósea es una excelente fuente de calcio, fósforo y cobre, y masticar huesos grandes puede ayudar a eliminar el sarro.
Hígado crudo o cocido Una pequeña cantidad de hígado es buena para los perros, pero demasiado puede causar problemas. Debido a que el hígado contiene una gran cantidad de vitamina A, puede causar intoxicación por vitamina A. Hasta tres hígados de pollo por semana (o la cantidad correspondiente de hígados de otros animales) pueden causar problemas óseos.
El sistema inmunológico de los perros que comen carne y aves crudas no puede adaptarse a las aves criadas artificialmente. Los tipos más comunes de salmonella y bacilos son muy peligrosos para los perros. Y alimentarlos con carne cruda con regularidad puede despertar los instintos primarios en los perros, promoviendo así la agresión.
Cerdo Los glóbulos de grasa de la carne de cerdo son más grandes que los de otras carnes y pueden obstruir los capilares de tu perro. Evite los productos derivados del cerdo, especialmente el tocino, que contiene nitrato de sodio.