Métodos de reproducción de rosella
Las flores de hibisco se suelen plantar en mayo y es mejor plantarlas directamente en campo abierto. La cubierta de la semilla de esta flor es muy dura, por lo que antes de sembrar, debes elegir flores con semillas llenas y luego remojarlas en agua tibia durante aproximadamente 12 horas, esperar hasta que se hinchen y germinen, y luego plantarlas en la tierra de la maceta. Luego preste atención al riego. Lo mejor es mantener la tierra ligeramente húmeda en todo momento o cubrirla con film plástico para mantenerla caliente y favorecer la germinación de las semillas. Generalmente, tarda de una a dos semanas en germinar. Cuando las hojas comienzan a crecer, se retira gradualmente la película plástica y se retiran las plántulas débiles, dejando solo plántulas de flores sanas y regordetas. Aplique fertilizante líquido ligero una vez a la semana para asegurar suficientes nutrientes y promover el crecimiento de las plántulas. Una vez que a las plántulas les hayan crecido cuatro o cinco hojas, se pueden trasplantar.
2. Método de corte
El corte del hibisco es relativamente sencillo. Durante el período de crecimiento de la planta, elija ramas sanas, fuertes, maduras y con cogollos para cortar, con una longitud de unos 10-15 cm. Recorta las partes inferiores de las hojas, dejando solo de tres a cinco hojas tiernas en la parte superior. Inserte las ramas en arena húmeda, sumerja aproximadamente la mitad de los esquejes y luego riegue adecuadamente para asegurarse de que la tierra esté húmeda. Tenga cuidado de proporcionar una sombra adecuada a las plantas nuevas y evite la luz solar directa. Las ramas tardarán aproximadamente un mes en echar raíces y crecer, y luego reducir gradualmente la sombra y aumentar la luz para un mantenimiento normal.
3. Métodos de división de plantas
La propagación de la jamaica se realiza mejor en primavera y otoño. Saque la planta madre de la tierra, retire con cuidado el exceso de tierra de las raíces, enjuague las raíces y pode los tocones y las raíces podridas. Divida la planta madre en manojos más pequeños siguiendo su tendencia de crecimiento natural, cuidando que cada manojo contenga una porción de raíces sanas. Plante los manojos separados de plantas pequeñas en el suelo preparado, preste atención al riego adecuado y realice un mantenimiento diario razonable. Los hibiscos propagados mediante el método de división generalmente tienen una alta tasa de supervivencia y pueden reanudar el crecimiento y la floración según lo programado en el año de la división.