Cómo matar y manipular tortugas
Primero, gira la tortuga de espaldas al suelo y su vientre hacia el cielo. Cuando gire vigorosamente y estire el cuello hasta su posición más larga, corte rápidamente la raíz del cuello con un cuchillo afilado y luego levántelo para controlar el flujo sanguíneo. Otro método consiste en romper el hueso del cuello de la tortuga con el dorso de un cuchillo. La clave de este paso es sujetar bien el cuchillo antes de darle la vuelta y tener manos y ojos rápidos.
2. Poner la tortuga sacrificada en agua caliente a unos 80 grados y blanquearla durante 2 a 5 minutos. El tiempo y la temperatura específicos dependen de la edad y la estación de la tortuga. Depende principalmente de si la superficie del cuerpo de la tortuga se vuelve ligeramente blanca para poder recogerla y enfriarla inmediatamente. La clave de este paso es que la temperatura del agua no debe ser demasiado alta y el tiempo de remojo no debe ser demasiado largo, de lo contrario la piel se adherirá a la carne y será difícil pelarla. Si tienes miedo de que la temperatura del agua sea difícil de controlar, puedes bajarla a unos 60 grados y pelarla en remojo.
En tercer lugar, la piel dura del cuerpo de la tortuga se ha desprendido y se desprende fácilmente. Usa tijeras o un cuchillo afilado para hacer una cruz en el vientre de la tortuga, extrae los órganos internos y corta las extremidades y la cola. La clave es quitar la mantequilla de las patas, ya que el aceite de la tortuga tiene sabor a pescado. También puedes cortar la parte inferior de la falda de la tortuga a lo largo de la periferia, levantar la tapa y sacar los órganos internos.
En cuarto lugar, raspa suavemente la piel negra y sucia de la tortuga. Tenga cuidado de no rayar ni raspar la falda, ya que la falda es la parte más fresca, tierna y deliciosa de la tortuga. Después de raspar la piel negra, lávela hasta dejarla limpia.
5. Abra la mandíbula de la tortuga y vea si hay ganchos. Esto significa que la limpieza está básicamente completa. Este paso también es muy importante. Siempre revisa el mentón, ten cuidado. El gancho para colgar la tortuga no es muy grande y queda escondido muy profundo. Si es demasiado problemático, puedes desechar el glande al cortarlo.