¿Comer ajo crudo realmente puede prevenir el cáncer? ¿Existe alguna base científica para esta afirmación?
El ajo es imprescindible en la dieta diaria. No sólo es un condimento sino que también previene enfermedades. En el antiguo Egipto, el ajo se utilizaba como medicamento tópico. Los médicos abogaban por la administración oral de ajo para tratar el cáncer. Según una investigación científica extranjera del NCI, el ajo se encuentra en la cima de la pirámide alimenticia para la prevención del cáncer. Los compuestos orgánicos de azufre presentes en el ajo fresco incluyen principalmente monosulfato de dialilo, disulfuro de dialilo y alicina, que es trisulfato de dialilo. Pueden bloquear la actividad de los carcinógenos y aliviar los efectos secundarios tóxicos de los carcinógenos.
La alicina puede inhibir tumores como el cáncer de recto, tumores de próstata, cáncer de hígado, cáncer intestinal y enfermedades de la piel. Prueba de extracto: Las pruebas realizadas con preparaciones medicinales de ajo únicas han confirmado que el extracto de ajo: AGE tiene el efecto de inhibir la proliferación de células tumorales y prevenir los carcinógenos químicos. Las pruebas han confirmado que los AGE tienen un efecto bloqueador sobre las causas del cáncer de próstata, cáncer de mama, cáncer intestinal, cáncer de esófago, cáncer de hígado, enfermedades de la piel y cáncer de recto.
El papel clave del ajo en la prevención de tumores malignos es en el tracto digestivo, como el cáncer de esófago, cáncer gastrointestinal, cáncer colorrectal, etc. Por supuesto, su efecto preventivo sobre otros cánceres es muy evidente. La razón por la que el ajo previene los tumores gastrointestinales es que inhibe las bacterias de recuperación que producen nitrito de sodio, reduciendo así la posibilidad de que el nitrito de sodio se convierta en aminas de nitrito. Según investigaciones científicas contemporáneas, el ajo contiene compuestos orgánicos de azufre (OSC), que incluyen alicina, sulfato de dialilo, disulfuro de dialilo, trisulfato de dialilo, etc.
Esta es también la razón principal por la que tiene la capacidad de prevenir enfermedades: puede resistir gérmenes, bacterias, disminuir los lípidos en sangre, prevenir la arteriosclerosis, prevenir el cáncer, etc. Por eso, el ajo es realmente bueno. El ajo se puede ver a menudo en nuestra vida diaria, como ajo encurtido, salsa de ajo, salsa para mojar bolas de masa, salsa de chile con ajo, etc. El ajo también se encuentra en muchos platos de cocina, y algunos se comen crudos como yo. Entonces, ¿cuál es la mejor forma de comer para prevenir el cáncer? Las investigaciones han descubierto que calentar el ajo puede reducir su eficacia anticancerígena. Porque, después de calentar y cocinar, los compuestos orgánicos de azufre del ajo se reducirán significativamente. Además, después de cortar y moler el ajo, la destrucción de las células vegetales puede activar la alliase y promover la disolución de la alicina, por lo que triturarlo en ajo picado es una buena opción.