Cómo regular la constitución por deficiencia de Qi
Cómo ajustar la constitución por deficiencia de Qi
1. Ajuste de la dieta
Ajustar la vida diaria
Abogar por un equilibrio entre trabajo y descanso, hazlo. No trabajar demasiado para evitar lesiones. Justo. Evite siempre la sudoración y la exposición al viento. El ambiente del salón debe utilizar colores brillantes y cálidos.
Ejercicio
Si el cuerpo carece de ejercicio, es probable que se encuentre en un estado subsaludable y es más probable que tenga deficiencia. Si desea que su cuerpo alcance un estado saludable, debe hacer ejercicio con regularidad. Las personas con deficiencia de Qi no deben realizar ejercicio extenuante al principio, pero sí algún ejercicio aeróbico, como yoga, jogging, Tai Chi, etc.
¿Cuáles son los síntomas de la constitución deficiente de Qi?
1. Pérdida de apetito
Las personas con una constitución deficiente de Qi tienen el bazo y el estómago relativamente débiles, lo que también afectará la función del bazo y el estómago, provocando que los pacientes coman muy poco. Pierde el apetito y experimenta dolor abdominal después de comer.
2. Hinchazón
Si quieres saber si tienes deficiencia de Qi, primero debes observar la forma de tu cuerpo. Si tiene sobrepeso, debe considerar si está débil. Las personas con una constitución deficiente de Qi generalmente son obesas y su piel parecerá flácida y opaca.
3. Sudoración espontánea
La sudoración espontánea significa que sudarás si no haces ejercicio. Esto es anormal. El sistema endocrino de nuestro sistema digestivo tiene funciones fijas para mantener el funcionamiento de los órganos del cuerpo. Si sudas demasiado, todo tu cuerpo se sentirá débil y te sentirás nervioso. La sudoración excesiva por detrás puede afectar el sueño y provocar pérdida de memoria.
4. Ni el frío ni el calor
Las personas con una constitución deficiente de Qi son relativamente débiles. Cuando la temperatura es alta, sudarán fácilmente y cuando la temperatura baja, sentirán frío. Desde la perspectiva de la medicina tradicional china, el Qi del cuerpo humano puede regular la temperatura corporal y controlar el estado de los poros de la superficie de la piel. Las personas con una constitución deficiente de Qi tienen poca capacidad para regular la temperatura corporal y no pueden controlar mejor la secreción de las glándulas sudoríparas, por lo que mostrarán síntomas de miedo al frío y propensión a sudar.