Probabilidad de vivir hasta los 100 años
La vida humana es corta y larga. Si bien ninguno de nosotros puede extender la duración de nuestras vidas, podemos expandir la amplitud de nuestras vidas. Vivir bien cada día es el mayor sentido de la vida.
¿Cómo vivir más?
1. La esperanza de vida de las mujeres aumenta en 10 años
Las mujeres en casi todos los países viven más que los hombres, con un promedio de aproximadamente un 10% más que los hombres. Además de los factores ambientales y genéticos, la corta esperanza de vida masculina también está relacionada con los andrógenos, que determinan el comportamiento agresivo y competitivo en los hombres, haciéndolos más susceptibles a una muerte prematura por violencia, accidentes y toma de riesgos. Los andrógenos también reducen los niveles de colesterol saludables para el corazón, mientras que el estrógeno en las mujeres aumenta los niveles de colesterol saludables para el corazón.
2. La felicidad suele añadir 9 años a la vida.
Los estudios han descubierto que las personas con actitudes optimistas tienen estilos de vida más saludables y pasan más tiempo participando en deportes y actividades sociales. Los optimistas se recuperan más rápido de enfermedades y traumas, viven más y tienen menos probabilidades de quedar discapacitados. La felicidad aumenta la inmunidad de una persona al aumentar la cantidad de células antibacterianas y que combaten enfermedades.
3. La esperanza de vida aumenta 7 años después del matrimonio.
Las personas casadas viven más que los divorciados, viudos, viudas y solteros. Un estudio estadounidense encontró que las personas que nunca han estado casadas tienen dos tercios más de probabilidades de morir prematuramente y de sufrir crisis económicas y problemas de salud física y mental. Una vez que ocurre la enfermedad, las personas casadas se recuperan más rápido y tienen tasas de supervivencia más altas frente a algunos cánceres.
¿Qué comer para vivir más?
1. Hongo.
Cada 100 gramos de hongo negro contienen 98 miligramos de hierro, unas 5 veces más que el hígado de cerdo, que tiene el mayor contenido de hierro entre los alimentos animales, y 30 veces más que las espinacas, que tienen el mayor contenido de hierro. Contenido de hierro entre vegetales de hojas verdes. Sin hierro, no tenemos sangre fresca, que es un componente importante de la hemoglobina. La deficiencia de hierro puede provocar debilidad, irritabilidad, olvidos, palidez, mareos y palpitaciones del corazón.
2.
Comer una manzana al día puede reducir significativamente el riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer. La quercetina contenida en las manzanas no sólo tiene efectos antiinflamatorios, sino que también previene el desarrollo de células cancerosas. Las manzanas también son ricas en vitaminas y minerales que pueden mejorar la inmunidad humana y la función cardiovascular.
3. Queso.
40 gramos de queso = 200 ml de yogur = 250 ml de leche. ¡Un pequeño trozo de queso contiene tanto calcio como un vaso grande de leche! El calcio es el mineral más abundante en el cuerpo; el 99% se encuentra en los huesos y los dientes para construir el poderoso "hardware" del cuerpo.
4. Peras.
La pera se llama "agua mineral natural" porque es fresca y jugosa, contiene un 85% de agua, agridulce y rica en vitaminas y oligoelementos como calcio, fósforo, hierro, yodo, etc. . Desde la antigüedad se le conoce como el "Pastel de las Cien Frutas".
5.
El trigo sarraceno contiene poderosos antioxidantes que pueden reducir los lípidos en sangre, mejorar la elasticidad de los vasos sanguíneos y prevenir la coagulación de la sangre. Es un buen alimento protector del corazón. Además, tiene un buen efecto para reducir la presión arterial y ayudar a conciliar el sueño.
6.
Las personas preocupadas por la salud del corazón deberían comer más pescado. Cocinar platos de pescado tres veces por semana o comer 30 gramos de pescado al día puede reducir el riesgo de sufrir un ictus en un 50%. La investigación médica ha demostrado que los japoneses y esquimales que comen pescado con frecuencia tienen una tasa mucho menor de enfermedades cardiovasculares que aquellos que rara vez comen pescado.