Cómo convertir la sopa de pescado en un color blanco lechoso
Primero, ponemos aceite en la olla y lo calentamos. Freír el pescado hasta que esté ligeramente dorado por ambos lados. Frote el fondo de la olla con rodajas de jengibre para que el pescado frito no se rompa fácilmente. Si utilizas manteca de cerdo para freír pescado, la sopa de pescado se pondrá blanca más fácilmente.
En segundo lugar, lo mejor es llenar la olla con agua hirviendo de una vez, y asegurarse de usar fuego en los primeros diez minutos. Guisar en agua fría o a fuego lento puede hacer que la proteína del pescado se encoja y se solidifique fácilmente, lo que dificulta su descomposición y se vuelve de color blanco lechoso.
3. Ponga una cucharada de leche en el pescado guisado, lo que no solo elimina el olor a pescado, sino que también hace que la carne del pescado esté fresca y tierna, y la sopa de pescado quede blanca y deliciosa.