Anuncio No. 4 de la Sede de Control y Prevención de Epidemias de Tianjin
Fortalecimiento de la protección personal
La primera línea de defensa en la prevención y el control de epidemias es la protección personal. Los ciudadanos deben usar mascarillas al salir, lavarse las manos con frecuencia, evitar reuniones y mantener la distancia social. También preste atención a la ventilación y mantenga la circulación del aire interior.
Fortalecimiento de la prevención y el control comunitario
La comunidad es la segunda línea de defensa para la prevención y el control de epidemias. El personal comunitario debe investigar exhaustivamente el estado de salud de los residentes, informar los casos sospechosos de manera oportuna y realizar aislamiento y observación. Al mismo tiempo, es necesario reforzar la desinfección en zonas residenciales y lugares públicos para garantizar la higiene ambiental.
Fortalecimiento de la prevención y el control médico
Las instituciones médicas son la última línea de defensa para la prevención y el control de epidemias. Todas las instituciones médicas deben fortalecer el diagnóstico y tratamiento de los pacientes, implementar estrictamente medidas de protección y garantizar la seguridad del personal médico. Al mismo tiempo, se debe realizar bien el trabajo de seguimiento de casos y aislamiento para evitar la propagación de la epidemia.
Fortalecer la divulgación de información
La prevención y el control de epidemias requieren la participación de todas las personas, y la divulgación de información es una forma importante de proteger el derecho del público a saber. Los gobiernos en todos los niveles deben publicar información sobre la epidemia de manera oportuna, transmitir al público conocimientos correctos de prevención y control y mejorar la conciencia pública sobre la autoprotección.
Fortalecer la prevención y el control conjuntos
La prevención y el control de epidemias es un proyecto sistemático que requiere la plena cooperación de todos los departamentos, unidades y comunidades. Los gobiernos en todos los niveles deben fortalecer el liderazgo y la coordinación en la prevención y el control de epidemias, establecer mecanismos conjuntos de prevención y control y garantizar que todo el trabajo se lleve a cabo de manera ordenada.