El primer truco: Hay algunos proverbios populares sobre cómo cocinar bolas de masa: "Cocine primero la piel, luego el relleno", "Tapa la olla para cocinar el relleno y yo taparé la piel para cocinar". Como todos sabemos, el punto de ebullición del agua es de 100°C. Si la piel de la bola de masa se expone al agua, se "cocerá al vapor", pero el relleno seguirá cocido y el color de la sopa será turbio. Si abro la tapa de la olla y cocino, el vapor de agua se disipará rápidamente y la temperatura del agua solo se puede mantener a unos 100 grados Celsius. Las albóndigas y el agua hirviendo se revuelven constantemente para transferir el calor de manera uniforme cuando los envoltorios de las albóndigas están. cocido, luego cubra la tapa para cocinar el relleno, y el vapor de agua y el agua hirviendo pueden transferir calor rápidamente al relleno. El relleno de bola de masa no tardará en cocinarse. Las pieles de las bolas de masa cocinadas de esta manera no se rompen fácilmente, la sopa queda clara, las bolas de masa no se pegan a los dientes y tienen buen sabor.
El segundo truco: Después de que hierva el agua, agrega una cantidad adecuada de sal. Después de que la sal se disuelva, coloca las bolas de masa en la olla, luego tapa la olla y cocina hasta que estén cocidas sin voltear ni agregar agua fría. hasta. Las albóndigas cocinadas de esta manera no se pegarán a la piel ni a la sartén, y las albóndigas que queden en la sartén no se pegarán a la sartén.
El tercer truco: antes de hervir el agua para cocer las empanadillas, poner unas puntas de cebolla verde y añadir las empanadillas después de que hierva el agua, así las empanadillas cocidas no se romperán ni se pegarán entre sí.
En cuarto lugar, para evitar que las empanadillas se peguen a la sartén, puedes añadir un huevo a la masa. Además, si quieres que la carne se cocine más rápido, puedes añadir un poco de vinagre al agua.