Red de conocimiento de recetas - Recetas gastronómicas - Cinco formas de combatir los gusanos del arroz

Cinco formas de combatir los gusanos del arroz

1. El jengibre puede repeler los insectos en el arroz. Coloque jengibre fresco en un recipiente lleno de arroz, coloque un trozo en la parte superior, media y inferior. Los insectos se acabarán cuando huelan el olor a jengibre. Espera a que los bichos se escapen antes de sacar el jengibre para evitar que se eche a perder y contamine el arroz.

2. Los chiles tienen un sabor especial y también pueden ahuyentar a los insectos. Coge unos 30 trozos de pimiento, divídelos en tres partes, envuélvelos en una gasa o paño de algodón y colócalos encima, en el medio y en el fondo del arroz, y todos los bichos huirán. Este método también se puede utilizar para prevenir las plagas del arroz. Después de colocar los pimientos, ata bien la bolsa de arroz y colócala en un lugar fresco y ventilado. El arroz almacenado de esta manera no tendrá un olor extraño y no hay necesidad de preocuparse por afectar el sabor del arroz.

3. Hojas de álamo. Después de que el arroz esté infestado de insectos, traslade el arroz a un recipiente seco y sellado, recoja algunas hojas de álamo limpias, colóquelas uniformemente en el arroz y luego selle el recipiente. Después de unos cuatro días, vuelva a abrir el recipiente. Los insectos y los huevos han sido eliminados. Luego use un colador para filtrar los insectos en el arroz.

4. La congelación generalmente, los insectos mueren en invierno, por lo que congelar el arroz también puede ahuyentar a los insectos. Divida el arroz en varias porciones, no demasiadas, póngalo en una bolsa limpia, átela bien y póngala en el congelador del frigorífico. Pasadas unas 48 horas, sácalo, déjalo un rato, limpia el agua del exterior de la bolsa y filtra el arroz.

5. Secado, este método es relativamente sencillo, no es necesario añadir nada. Saque el arroz, extiéndalo en una bolsa limpia y colóquelo en un lugar fresco y ventilado para que los insectos del arroz salgan. No te expongas a la luz del sol. A los insectos les gustan los lugares cálidos, pero tomar el sol les hace reacios a salir.