Apto para personas a las que les gustan las zanahorias ralladas frías.
Es más adecuado para pacientes con cáncer, presión arterial alta, ceguera nocturna, ojos secos, desnutrición, pérdida de apetito y piel áspera.
Pero no comer demasiado, ya que puede provocar pigmentación en la piel.
Pero en general el rábano es beneficioso e inofensivo, y comerlo frío es más propicio para la conservación del caroteno y más nutritivo.