Compré un coco y se me acabó el jugo. ¿Cómo puedo comer carne?
Método 1:
Primero saca la leche de coco, luego cocínala al vapor en una olla durante 10 a 20 minutos, la pulpa del coco se separará automáticamente del caparazón. Puedes cortar la cáscara como quieras y obtener una pulpa de coco hueca y esférica. Cava un pequeño agujero, mete una cuchara en él y saca la pulpa para poder sacar toda la pulpa sin dañar la cáscara del coco.
Método 2:
Use un martillo para golpear el coco, aplástelo, use un destornillador para abrirlo lentamente, pele un trozo grande de pulpa de coco y luego use Un cuchillo para quitar los restos de piel negra de la pulpa del coco. Cuando se pela, la pulpa blanca del coco queda perfectamente revelada.
Método 3:
Primero mete el coco en el congelador y congélalo rápidamente durante aproximadamente 1 hora. Luego coge una olla con agua caliente, mete el coco, retira la piel blanca del interior y sirve.
Método 4:
Al hornear en el horno, la cáscara del coco se agrieta por sí sola y se puede romper por completo con un martillo pequeño.
Pelar la pulpa del coco y picarla más con un cuchillo de cocina.
Colocar en una licuadora y mezclar con agua, preferiblemente agua hirviendo. Asegúrate de que esté todo destrozado.
Vierte la leche de coco batida y añade miel a la sopa de coco fresca. El sabor es delicioso, el aroma del coco es rico y es diez veces mejor que el agua de coco.