¿Cómo aprendió la gente a comer?
La llamada atención plena significa que prestas plena atención y eres consciente acríticamente de tu mundo interior y exterior. Puede conectar la sabiduría y las almas de las personas a un nivel más profundo y promovernos a pensar, analizar, juzgar y resolver problemas más profundamente.
Cuando se aplica la sabiduría a la dieta, podemos desarrollar el buen hábito de comer conscientemente. Incluye los siguientes principios.
Solo tú conoces tus necesidades físicas y mentales: Solo tú sabes qué tan hambrienta o llena está una persona, y cuánto necesita comer. Una vez que obtengamos una comprensión profunda de nuestra sabiduría interior y exterior, podremos tomar decisiones flexibles sobre nuestra salud y nuestro peso.
Puedes aprender sobre ti mismo a través de tus pensamientos y sentimientos, en lugar de castigarte: aprender a estar abierto a tu cuerpo, emociones y hábitos alimentarios en lugar de criticarlos puede ayudarnos a tomar decisiones más inteligentes sobre qué comer y cuanto comer.
3 No existe la mala comida: La comida no es absolutamente buena o mala, sólo tiene distintos grados de valor y satisfacción.
Contar calorías es importante: Comprender el valor calórico de los alimentos y nuestras propias necesidades puede ayudarnos a tomar mejores decisiones alimentarias.
Tu sabiduría interior y exterior pueden trabajar juntas: estos dos tipos de sabiduría provienen de la atención plena y se complementan para guiar nuestra toma de decisiones en cada momento.
⑥Confiar en la fuerza de voluntad y la culpa puede conducir a la insatisfacción y la lucha: sólo si te mantienes en contacto con tus propios pensamientos y emociones sobre la comida podrás lograr mejor la atención plena.
⑦Siempre tendrás relación con la comida: Nuestra mentalidad a la hora de comer determina si nuestra relación con la comida es positiva o negativa.
8 La alegría se puede encontrar en cada bocado: aprender la atención plena nos permite disfrutar plenamente de la alegría y el alimento que aporta la comida.
Tu vida no se limita a tus hábitos alimentarios: la dieta y el peso son sólo una pequeña parte de la vida, y hay muchos más aspectos de la vida dignos de nuestro conocimiento, atención y aprecio.
En segundo lugar, el hambre real
Muchas veces, comemos a ciegas. Hace que las personas pierdan el autocontrol, haciéndolas comer más y disfrutar menos. Sólo sabiendo por qué comes podrás evitar patrones alimentarios incorrectos.
1. Los motivos por los que comemos
Hay muchos motivos para comer. Sólo conociendo las diferencias podremos controlar mejor nuestros hábitos alimentarios. Incluye el siguiente contenido:
①Hambre física: El hambre es un mensaje importante que produce el cuerpo y además es la forma más saludable de comer. Los autores dicen que asociar el hambre es el freno más poderoso contra la alimentación sin sentido.
2 Ver la comida: Mientras veas, pienses o escuches la comida, inducirás el deseo de comer.