Calentamiento de hongo negro y sopa de melón de invierno
1. Prepara los ingredientes
Primero remoja el hongo en agua durante 1 hora, luego sácalo y pícalo en trozos.
Preparar un trozo de melón de invierno, quitarle la piel y la pulpa y cortarlo en tiras finas.
Se corta también media zanahoria en tiras finas.
Preparar otro jamón y cortarlo en las mismas tiras finas.
Corta un poco de cebolla verde y jengibre picado y reserva.
Rompe 2 huevos en un bol y añade rápidamente el líquido del huevo.
Preparar una olla pequeña, poner una cucharada de almidón y una cantidad adecuada de harina, agregar una pequeña cantidad de agua a la vez y remover hasta obtener una masa fina.
Picamos un poco más de cilantro y reservamos.
2. Cuando los ingredientes estén listos los blanqueamos.
Añade la cantidad adecuada de agua a la olla. Cuando el fuego hierva, añadimos el melón de invierno y las zanahorias y las blanqueamos durante 30 segundos hasta que queden crudas.
Añadimos los hongos y el jamón, lo escaldamos ligeramente, lo escurrimos y lo ponemos rápidamente en agua para que se enfríe y quede más crujiente.
3. Después de escaldar, empezar a cocinar la sopa a fuego lento.
Calienta la olla, agrega un poco de aceite base, agrega la cebolla verde picada y el jengibre picado y sofríe hasta que esté fragante, luego vierte una cantidad adecuada de agua a lo largo del borde de la olla, vierte el lado blanqueado. platos, añadir 2 g de sal, 2 g de pimienta, 10 g de salsa de soja y 5 g de jugo de pollo (o esencia de pollo).
Cuando el fuego hierva, retira la espuma de la olla, vierte la masa mientras revuelves y ajusta a tu consistencia preferida.
Continúa cocinando hasta que la sopa hierva, luego reduce el fuego a bajo y vierte el huevo líquido. Después de que todos los huevos hayan flotado, vierte un poco de aceite de sésamo y espolvorea con cilantro.
Consejos: 1. Es mejor remojar el hongo negro en agua limpia o tibia para que quede más crujiente.
2. La masa solo se puede mezclar con harina y se puede añadir almidón para aumentar el brillo.
3. Las guarniciones escaldadas deben enfriarse rápidamente para que tengan un sabor más crujiente y tierno.