Cultivar el civismo, los buenos hábitos y la masculinidad de los niños
Modales cívicos
Deje que los niños aprendan la etiqueta y las reglas básicas, como saludar al reunirse, despedirse al salir, aplaudir al escuchar y expresar gratitud al recibir un servicio agradecido. Enséñeles a sentarse y pararse con gracia y con movimientos constantes. Observa el orden al hacer cola y evita peleas al comer. Estas reglas aparentemente simples requieren paciencia y perseverancia para cumplirlas. Desde una edad temprana, los niños son entrenados para ser personas civilizadas, educadas y disciplinadas.
Buenos hábitos
Enséñeles a los niños a acostarse y levantarse temprano, a tener un horario regular de trabajo y descanso, a cambiarse de ropa con frecuencia, a bañarse con regularidad y a desarrollarse bien; Hábitos de higiene. Al mismo tiempo, edúquelos para priorizar, terminar sus tareas antes de jugar y cultivar su capacidad para manejar los asuntos de manera ordenada. El desarrollo de estos hábitos sentará una base sólida para el éxito futuro de los niños.
Masculino
Cultivo del orgullo nacional, el patriotismo y la masculinidad en los niños, para que comprendan la importancia de la responsabilidad y la responsabilidad. Educarlos para que sean de mente abierta, tolerantes y generosos, para unir conocimiento y acción y para tener una perspectiva internacional amplia. Complementar a los niños con alimento espiritual a través de diversos métodos y moldear sus cualidades masculinas y responsables.
Paciencia y comprensión
La paciencia es muy importante en el proceso de educación de los niños. Cuando un niño comete un error, no se apresure a culparlo, analice con calma las razones, guíelo para que reconozca el error y lo corrija activamente. A través de la comprensión y el apoyo, construimos una relación de confianza con nuestros hijos y los ayudamos a tener más confianza y una actitud positiva a medida que crecen.