Sobre cómo abordar la relación entre la realidad primaria y secundaria al dibujar naturalezas muertas
Las flechas representan las relaciones primarias y secundarias que irradian desde el centro de la imagen: el "ojo del pintor". En términos generales, el "ojo pintado" está en el centro de la sección dorada de la imagen. Otros objetos deberían basarse en él como estándar y gradualmente volverse secundarios. Para las partes que están claramente representadas, los detalles deben obedecer al todo. Esta es la clave para dar forma a un solo objeto. Tomemos como ejemplo este "pilar de cemento". Las barras de acero, los poros y los huecos del interior son todos detalles tallados, pero debemos saber que este objeto es ante todo un cilindro. Primero debes dibujar la relación básica de luz y oscuridad y el volumen del cilindro. En base a esto, talla los detalles. La mayoría de los estudiantes tienden a comenzar desde el área local y sienten que cada detalle está en su lugar, pero al final aún no logran lograr el efecto requerido. Debes saber que la razón es que “la parte no es igual al todo”. Puede que este fenómeno no sea obvio en las pinturas de bodegones, pero la sensación es particularmente fuerte cuando se pinta sobre una estatua de yeso. La nariz, los ojos, etc. parecían estar dibujados con mucha precisión, pero al final parecían "diferentes". Por lo tanto, al pintar una pieza, debes tener una idea general en mente. Primero encuentre el todo y expréselo con precisión, encuentre las partes dentro de este marco y siempre regrese al todo para ver si excede el marco general.