Red de conocimiento de recetas - Recetas de frutas - Bizcocho tradicional

Bizcocho tradicional

1. Método de mezcla por separado de clara y yema de huevo

El proceso de separación de clara y yema de huevo es relativamente complicado y el orden de alimentación es crucial para la calidad del pastel. Por lo general, las claras y las yemas deben batirse por separado, por lo que es mejor tener dos batidoras, una para las claras y otra para las yemas. Batir las claras y el azúcar hasta formar una espuma, mojar con las manos y dejar reposar hasta que la punta caiga ligeramente, por otro lado, batir las yemas y el azúcar de manera uniforme, agregar lentamente la espuma de clara a la pasta de huevo; Finalmente agregue la harina y revuelva uniformemente para hacer una masa. Durante la operación, para solucionar el problema de la sequedad de boca, se puede añadir un poco de aceite para batir la yema de huevo y utilizar el efecto emulsionante de la yema de huevo para mezclar el aceite y la yema de manera uniforme.

2. Revolver el huevo entero con el azúcar

El método de mezcla huevo-azúcar consiste en mezclar los huevos y el azúcar hasta que estén espumosos, y luego agregar los demás ingredientes. El proceso de elaboración consiste en juntar todos los huevos y el azúcar de la receta, meterlos en una batidora y mezclar a velocidad lenta durante 2 minutos. Cuando el azúcar y los huevos estén uniformemente mezclados, bata a velocidad media hasta que el azúcar del huevo adquiera un color blanco lechoso y se pueda unir con los dedos. Cuando la masa de huevo no fluya, bata rápidamente hasta que la masa de huevo pueda levantarse, pero no esté muy sólida, y el volumen alcance aproximadamente 3 veces el azúcar del huevo original. Tamizar la harina seleccionada, verterla lentamente en el azúcar de huevo que haya subido y luego.

3. Método de emulsificación

La emulsificación se refiere al método de añadir emulsionantes al hacer bizcochos. El emulsionante para tortas, también llamado aceite para tortas en China, puede promover la estabilidad de la espuma y del sistema de dispersión de aceite y agua. Su aplicación supone una mejora respecto a las técnicas tradicionales, reduciendo especialmente la dificultad de elaboración de bizcochos tradicionales. Al mismo tiempo, se puede disolver más agua y aceite en el bizcocho producido, lo que hace que el producto tenga menos probabilidades de envejecer, secarse y endurecerse, y tenga una textura más húmeda, lo que lo hace más adecuado para la producción en masa.