¿Qué deben comer los pacientes con hepatitis B?
2. Consuma una dieta de "tres altos y uno bajo". Los "tres altos" se refieren a: alto en proteínas, alto en calorías y alto en vitaminas; el "uno bajo" se refiere a bajo en grasas, moderado; suministro y menos residuos. Utilice suficiente proteína para proteger las células del hígado y promover la reparación y regeneración de las células del hígado. Sin embargo, existen algunos casos especiales. Cuando los pacientes muestran signos de insuficiencia hepática o encefalopatía hepática, el amoníaco en sangre suele aumentar, por lo que la ingesta de proteínas debe controlarse estrictamente según la gravedad de la afección. En cuanto a cuánta proteína comer en este momento, lo más adecuado es seguir las indicaciones del médico y no aumentar la ingesta de proteínas sin autorización.
3. Elige una variedad de alimentos frescos y con alto valor nutricional. Los alimentos con proteínas tienen ventajas y desventajas. Los alimentos con mejores proteínas son la leche, los huevos, el pescado y los mariscos, seguidos de las carnes de pollo, ganso, pato y paloma. La carne de res, cordero, cerdo y conejo son carnes magras y no son aptas para comer despojos de animales. Los productos de soja, los champiñones y las algas son las mejores opciones de proteína vegetal. Las verduras deben ser una variedad de verduras frescas de temporada sin contaminación por pesticidas, principalmente verduras de color verde. La fruta debe pelarse y comerse fresca. Masticar algunos anacardos, pistachos, semillas de melón y otros frutos secos después de cada comida no sólo ayuda a la digestión, sino que también complementa la vitamina E y los oligoelementos.
4. Los alimentos cocinados no deben ser demasiado salados. Prestar atención a que los alimentos sean blandos y fáciles de digerir. Los pacientes con cirrosis compensada no deben ingerir más de 8 gramos de sal al día. la dieta debe tener menos sal o nada de sal.
5. Presta atención a complementar con alimentos ricos en zinc y selenio. La ingesta de zinc no debe ser inferior a 15 mg al día para proteger significativamente las células del hígado, por lo que se debe consumir más carne magra, pescado, camarones y mariscos. Puedes comer hasta 2 yemas de huevo al día. Los pacientes con cirrosis hepática y anemia pueden elegir alimentos ricos en hierro, como puré de hígado, puré de dátiles, gachas de frijoles adzuki y gachas de espinacas, y elegir adecuadamente alimentos anticancerígenos que contengan selenio, como bolsa de pastor, Houttuynia cordata, espárragos y cebollas. .