¿Cuáles son los síntomas de los problemas gastrointestinales de un perro?
Cuando un perro tiene malestar estomacal, su estado mental cambiará. Por ejemplo: el perro se vuelve tranquilo o frío, y ya no está tan animado como antes; rascarse o aferrarse al suelo. El cuerpo está en estado de tensión. Todos estos síntomas indican problemas gastrointestinales.
Algunos perros se vuelven irritables o incluso agresivos debido al malestar físico, mostrando dolor, miedo, ansiedad y otras reacciones emocionales. Los propietarios de automóviles deben buscar atención médica de inmediato para evitar que su condición empeore.
2. Pérdida de apetito
La pérdida de apetito es uno de los síntomas evidentes del malestar gastrointestinal en los perros. Cuando el perro ya no tiene el apetito que antes y no tiene energía después de comer, síntomas como vómitos, estreñimiento y diarrea se volverán más evidentes.
A veces, aunque los perros tienen apetito, solo comen muy poca comida, lo que también es uno de los síntomas del malestar gastrointestinal. La necesidad fisiológica de un perro es una determinada cantidad de alimento. Si no cubren las necesidades de tu perro, pueden provocarle desnutrición e incluso graves problemas gastrointestinales.
3. Le gusta lamer el suelo o comer hierba.
Cuando a un perro le molesta el estómago y no quiere comer, lame el suelo o come un poco de hierba para hacerlo. compensar el malestar. Esta situación es más común en verano, porque los perros no sudan lo suficiente y necesitan lamer el suelo o comer hierba para disipar el calor.
Pero si el perro presenta este fenómeno durante mucho tiempo, puede ser causado por problemas gastrointestinales, por lo que el dueño debe prestar atención y buscar tratamiento médico a tiempo.
4. Vómitos y diarrea
Las manifestaciones típicas del malestar gastrointestinal son los vómitos y la diarrea. Cuando los perros tienen mal estómago, suelen experimentar vómitos y diarrea. Los perros tienen diarrea, estreñimiento y algunos incluso tienen un dolor abdominal insoportable, con síntomas variables.
Lo que no se puede ignorar es si el perro sigue vomitando, diarrea, sangrando, etc. , esta ya es una situación muy crítica. Incluso si hay poco tiempo, el dueño debe enviar al perro al médico inmediatamente.