Abra y guarde el tofu blando en caja.
1. Pon el tofu tierno en el congelador: Después de abrir el paquete, puedes poner el tofu tierno en un recipiente limpio y meterlo en el congelador. Esto mantiene el tofu fresco y suave. Tenga cuidado de no poner el tofu directamente en el refrigerador para evitar que el olor y la humedad del refrigerador afecten la calidad del tofu.
2. Añade conservantes: Cubrir una fina capa de aceite vegetal comestible sobre la superficie del tofu puede prevenir el crecimiento de bacterias en el aire y prolongar su vida útil. Pon el tofu en el frigorífico.
3. Almacenamiento congelado: Si no planeas comer el tofu tierno en un corto período de tiempo, puedes cortarlo en trozos del tamaño adecuado y congelarlos en el congelador del frigorífico. El tofu blando congelado sabe casi a tofu fresco después de descongelarlo.