¿Quién no debería remojar cebollas en vino tinto?
Aquellos que son alérgicos al alcohol y a la cebolla; mujeres embarazadas, madres lactantes; aquellos que están tomando medicamentos, antibióticos, especialmente cefalosporinas y penicilinas después de una cirugía; aquellos con disfunción hepática y renal; Las personas que lo beben también deben prestar atención a la cantidad adecuada al beber. Beber de 15 a 20 ml con regularidad todos los días puede lograr el mejor efecto.
1. Las cebollas son muy ricas en nutrientes. No solo son ricas en potasio, vitamina C, ácido fólico, zinc, selenio, fibra y otros nutrientes, sino también en dos nutrientes especiales: quercetina y prostaglandina. . Estos dos nutrientes especiales aportan a la cebolla muchos beneficios para la salud que son insustituibles por otros alimentos: previene el cáncer, mantiene la salud cardiovascular, estimula el apetito, ayuda a la digestión, esteriliza y combate los resfriados, etc.
2. Los polifenoles únicos del vino tinto y otros compuestos orgánicos permiten que el vino reduzca los lípidos en sangre, inhiba el colesterol malo, ablande los vasos sanguíneos y mejore la función cardiovascular y la actividad cardíaca. También tiene efectos embellecedores y antienvejecimiento. El vino tinto también tiene funciones como favorecer la digestión, favorecer la pérdida de peso, la diuresis, esterilizar y regular el sistema cardiovascular.
3. Aunque la cebolla remojada en vino tinto es una bebida saludable, el vino tinto también es vino, por lo que no conviene beberlo en exceso. Generalmente, beber cincuenta mililitros al día puede conseguir buenas funciones para el cuidado de la salud. Para las personas que no suelen beber alcohol, también pueden diluirlo con aproximadamente el doble de agua antes de beber. Entonces, ¿quiénes son los grupos inadecuados para remojar cebollas en vino tinto?