¿Qué alimentos pueden provocar calor interno en verano?
¿Qué alimentos provocarán calor interno en verano? 1. Nueces.
Los frutos secos se refieren a diversos alimentos con semillas ricos en aceite, como cacahuetes, nueces, anacardos, piñones, semillas de melón, almendras, pistachos, etc. Cuando coma nueces en verano, asegúrese de consumirlas con moderación. Debido a que las calorías de las nueces son muy altas, las calorías de 50 gramos de semillas de melón equivalen a las calorías de un plato grande de arroz. Para una persona promedio, comer unos 30 gramos de frutos secos al día es una cantidad más adecuada. Los frutos secos tienen un efecto termogénico en el organismo, por lo que conviene consumirlos en invierno y menos en verano.
2. Frutas calientes
Comer más frutas calientes como lichis, longanes y albaricoques en verano puede provocar fácilmente un calor interno excesivo. El lichi contiene ingredientes hipoglucemiantes y comer demasiado provocará una reacción hipoglucemiante. Sin embargo, las personas con constitución caliente no pueden comer frutas calientes porque tienen energía, tienen dificultad para conciliar el sueño por la noche y tienen una tasa metabólica alta. Además, los niños con fiebre o inflamación de algún órgano deben evitar comerlo. Además de los lichis y los longanes, los melocotones, los longanes, la guayaba, las cerezas, los cocos, los durián y los albaricoques también son frutas calientes. Cómelo con moderación en verano, pero no te excedas.
Tercer condimento picante
El verano es muy caluroso y la temperatura muy alta. Al cocinar, el uso de condimentos picantes (como anís estrellado, hinojo, canela, pimienta, pimienta blanca, etc.) puede hacer que la boca se seque y sea insoportable, y también puede provocar algunas enfermedades del tracto digestivo y del tracto urinario. Comer condimentos picantes puede provocar estreñimiento, hemorroides, flatulencias, oliguria, dificultad para orinar, dolor de riñones, etc. Al mismo tiempo, también puede provocar enfermedades sistémicas, como estomatitis angular, faringitis, conjuntivitis, picazón, insolación, etc. Las personas que padecen enfermedades crónicas pueden agravar su condición si consumen especias picantes. Por tanto, no es recomendable utilizar más especias picantes en la cocina de verano.
Cuarto, la carne
Cuando la temperatura supera los 35 °C, las personas aumentan la viscosidad de la sangre debido a la sudoración, se vuelven inquietas y tienen peor temperamento al comer carne. La carne contiene una gran cantidad de proteína animal, lo que reducirá el contenido de triptófano en el cerebro, provocando que las personas se muestren agresivas, ansiosas y agresivas. En segundo lugar, la proporción de calcio en la carne no es alta. Comer demasiado hará que la concentración de calcio en el cuerpo sea demasiado baja y aumentará la tendencia de las personas a estar irritables y irritables. El consumo excesivo de carne puede endurecer los vasos sanguíneos y aumentar la presión arterial. La presión arterial elevada es una causa importante de inestabilidad emocional.