Cuidado de la salud en invierno: ¿Hay algo especial en beber vino?
Aunque hace mucho frío en invierno, después de un largo día de trabajo, sentarse alrededor de una cálida mesa de comedor con tu familia y beber unas copas de vino no sólo puede relajar tus meridianos, activar tus colaterales, y protegerte del frío. También puede calmar tu estado de ánimo y mantenerte saludable. Sin embargo, beber vino en invierno es en realidad algo muy particular. Siga al editor para ver las "Tres ventajas y tres cosas que debe hacer" de beber vino en invierno.
Aunque el invierno nevado es muy frío, después de un largo día de trabajo ajetreado, sentarse alrededor de una cálida mesa de comedor con familiares y amigos y beber unas copas de delicioso y nutritivo vino no solo puede relajar el Meridianos, activar los meridianos, resistir el frío, calmar el estado de ánimo y mantener una buena salud. Es realmente algo muy placentero. Sin embargo, beber vino en invierno es en realidad un asunto muy particular. No sólo hay que conocer la selección de vino adecuada y la temperatura de servicio, sino que también hay que prestar atención antes y después de beber. Preservación de la salud: Beber vino en invierno también presta atención a los "tres beneficios" de beber vino en invierno:
1. Tipo de vino: se recomienda vino tinto seco o fortificado
Elija vino. En invierno, el tipo de vino más adecuado no es otro que el tinto seco o el vino fortificado. Por un lado, en términos de sabor, este tipo de vinos son más ricos y completos que los blancos secos, y contienen más nutrientes, lo que puede aportar mejor a las personas las calorías que necesitan en invierno. Por otro lado, en cuanto a la temperatura de servicio, los tintos secos son generalmente más altos que los blancos secos, por lo que son más adecuados para beber en invierno. Además, desde la perspectiva de la restauración, la dieta de la gente en invierno se basa principalmente en carnes rojas como la ternera y el cordero, y estos alimentos son la mejor opción si se combinan con carnes rojas secas.
2. Temperatura de servicio: debe ser ligeramente superior a la temperatura del vino de verano.
Los amigos que aman el vino de uva saben que la temperatura óptima del vino en verano es de 8 a 14 grados centígrados. Si sirve vino a esta temperatura en el frío invierno, el vino puede convertirse en un "arma rompedor de estómago" para muchos amantes del vino. Por lo tanto, cuando se bebe en invierno, la temperatura a la que se sirve el vino puede ser ligeramente más alta para evitar molestias en el tracto gastrointestinal causadas por una temperatura demasiado baja del vino. De hecho, en Alemania, Francia, Austria, Italia y otros países es muy popular calentar vino para beber en invierno.